El Ministerio Público indaga sobre la complicidad de los jefes policiales, debido a que Mendoza no acudía a la comisaría desde hace 15 días, según reveló anoche la fiscala Lorena Ledesma.
Ello echa por tierra la versión dada desde la Comisaría Cuarta, el miércoles, señalando que Mendoza realizaba sus actividades personales solo en sus días libres.
La información surge luego de los primeros estudios del libro de novedades que retiró ayer de la Comisaría 4ª, precisamente para indagar en qué tiempo Mendoza trabajaba con los jefes mafiosos del Primer Comando Capital (PCC) capturados y expulsados el miércoles pasado.
Tras el escándalo que involucra a la Policía Nacional, fueron apartados de sus cargos el comisario Hugo Adalberto Ayala y el subcomisario Hugo Daniel Marín, quienes se desempeñaban como jefe y subjefe de la Comisaría 4ª, donde prestaba servicio el oficial Mendoza.
Dicha dependencia quedó a cargo del comisario Andrés Ferreira.
Asuntos Internos de la Policía abrió un sumario a los jefes policiales para determinar qué grado de participación pudieron haber tenido en la custodia de los jefes del PCC .
Pruebas. Ayer, una comitiva fiscal, encabezada por la agente Lorena Ledesma, de la Unidad Especializada de Lucha contra el Narcotráfico, se constituyó en la Comisaría 4ª Metropolitana y retiró libros de novedades.
Como Mendoza es de bajo rango, la Fiscalía busca probar la complicidad de oficiales superiores.