La cinta iba a estrenarse el 21 de mayo de 2021, día que se mantuvo al inicio de la pandemia, pero tras varios meses sin poder trabajar los responsables han decidido dar más de margen para el rodaje, que previsiblemente se retomará el mes que viene en Berlín.
El anuncio llegó minutos después de que Warner Bros. atrasara Tenet, la nueva cinta de Christopher Nolan que se estrenará el 31 de julio, dos semanas después de la fecha prevista del 17 de ese mes.
El plazo será mayor para Wonder Woman 1984, que ya había sido aplazada del 5 de junio al 14 de agosto, y se retrasará una vez más hasta el 2 de octubre.
Por su parte, Godzilla vs. Kong se lanzará en la fecha que antes estaba reservada para Matrix 4, el 21 de mayo de 2021.
Hollywood pendiente de Tenet
El lanzamiento de Tenet se está siguiendo con absoluta atención en Hollywood puesto que iba a ser la primera gran superproducción en desembarcar en las salas tras la crisis del coronavirus que ha mantenido los cines cerrados durante meses en todo el planeta.
Pese a que el resto de la industria fue aplazando sus estrenos más importantes, Nolan y el estudio Warner Bros. se mantuvieron firmes en su fecha del 17 de julio para Tenet y apostaron muy fuerte para que fuera el primer gran proyecto de Hollywood en ver la luz tras el confinamiento por la pandemia.
Finalmente, Tenet cederá ese honor (y ese notable riesgo económico) a Mulan, cinta de Disney que se presentará el 24 de julio tras haber retrasado su estreno de marzo.
A cambio, Warner Bros. anunció este viernes que el 17 de julio volverá a las salas Inception (2010), uno los mayores éxitos de Nolan, aprovechando que se cumple su décimo aniversario.
Con todos estos cambios, si antes los ojos de Hollywood estaban puestos en Tenet para calibrar el peligro de un gran estreno en plena crisis del coronavirus, ahora las miradas apuntan a Mulan.
Sin embargo, aunque tanto Tenet como Mulan son dos títulos de enorme envergadura, hay una diferencia muy significativa entre ambas: el “remake” de Disney tiene una parte importante de sus esperanzas puestas en China, un país que sufrió antes la crisis del coronavirus y que, por tanto, se encuentra en una fase más avanzada de la desescalada que Estados Unidos.
Para amortizar una superproducción de Hollywood (que superan los USD 100 millones de presupuesto e incluso los USD 200 millones), un estudio es que las salas estén funcionando a pleno rendimiento.
Por ahora, la exhibición y distribución han sobrevivido en EEUU con pequeñas y casi residuales soluciones de emergencia como los “drive-in” (autocines).
También se ha optado por lanzamientos directamente en internet, como ha sido el caso de las cintas Trolls World Tour, Scoob! y Artemis Fowl.