Vestidos de negro y portando carteles de protesta, un gran grupo de ciudadanos que utiliza regularmente el parque como espacio de recreación, se movilizó en Parque Guasu, donde marcharon y mostraron que existen varios puntos de vulnerabilidades del predio, exigiendo mayor seguridad.
Arturo Bregaglio, uno de los asistentes de la marcha, dijo: “Queremos espacios públicos seguros, donde la gente venga a relajarse, no a tensarse. Que venga sin miedo y que se pueda disfrutar”.
“En los países desarrollados cada 50 metros hay una cámara de seguridad y de acá nadie puede entrar ni salir enmascarado, por lo que ese tipo de seguridad debe haber; lastimosamente acá cualquiera puede entrar desde cualquier punto utilizando una pinza y cortando el tejido perimetral”, cuestionó por su parte el ciclista Luis Christ.
El hombre señaló que en el parque se siente más la inseguridad en los momentos en que hay poca gente. Esto, debido a los puntos considerados pulmones por los espacios verdes por los árboles y matorrales.
Liz Carolina Contrera mencionó que acude al parque para hacer sus caminatas, desestresarse y pasear a su perro, pero que en este momento le es inevitable sentir temor. “Falta mayor seguridad, ojalá se mantenga como ahora que hay muchos linces recorriendo por todos lados”, indicó.
Edel Rodríguez, a su vez, lamentó que tuviera que ocurrir un hecho lamentable como el abuso a la joven, para que las autoridades reforzarán las medidas de seguridad. “Es necesario digitalizar los ingresos para que la gente se sienta más segura”, acotó el joven.
En el parque se amplió la dotación de agentes con seis motos del Grupo Lince por turno y varios efectivos a pie.
El ataque que sufrió la joven generó ola de indignación ciudadana, debido a que la inseguridad reina, no solo en el Parque Guasu, sino también en otros parques públicos.