13 oct. 2025

Los dos niños

El ojo despierto

Mario Rubén Álvarez

Mario Rubén Álvarez

Cuando cada año nace el Niño de Belén la vida hace una pausa en sus dolores y angustias para guiarse por esa estrella de los Reyes Magos que conduce a la esperanza.

Hakuvérô jepe yvy, ivaivérô jepe la pórte, paran por un breve lapso aquellas dificultades que vuelven la existencia cuesta arriba. Y se inventa un espacio breve para compartir abrazos, palabras, vino, comida y también las lágrimas derramadas por los ausentes.

Aun los más pobres encuentran el modo de pasar una Nochebuena y anclar en la Navidad olvidando el acoso de la falta de medios de subsistencia.

Para los ribereños desalojados por la lenta mano líquida del río Paraguay, sin embargo, estas generalidades habituales —en la mayoría de los casos— han desaparecido.

Paradójicamente ese Niño acostado en un ajaka’i, rodeado de José, María, Melchor, Gaspar, Baltasar y los animales del pesebre, en una tierna escena de conmovedora sencillez, es el que expulsa de sus hogares a los que se han refugiado en parques, plazas, veredas, baldíos de propiedad de gente generosa y casas de parientes o amigos.

Por aparecer cada tanto en torno al nacimiento del Niño, a la sobredosis de lluvia y sus compañeros —granizos, tormentas, erosiones, cauces hídricos desbordados y calles convertidas en arroyos de aguas veloces y peligrosas— de la temporada de fin e inicio de año se le ha dado el mismo nombre.

Ese Niño embravecido que se derrama sin piedad y sin discriminar a nadie sobre la gente dista mucho de la ternura del que está rodeado de flor de coco, sandías, melones y piñas de cosecha local en el corredor de la casa, en una esquina iluminada o en un ángulo del patio.

La Navidad de los inundados es más triste que nunca. Para la mayoría, son dos naufragios en un año: el de julio pasado y el que está en curso.

Si al lado del río, en los pekuâ’i de rústica madera, las paredes de hule y el techo precario, nacía un Niño acorde a las circunstancias de pobreza, esta vez —en lugares altos—, en la mayoría de los casos, no hay medios ni razones para que nazca.

Seguro que el Niño de la Esperanza mira defraudado las escenas de su ausencia. No fue para que la injusticia en el reparto de la riqueza —responsabilidad de los políticos que no han sabido ni querido construir el bienestar de los desamparados— cayera como rayo despiadado sobre la cabeza de los mboriahu apî que él nació hace más de 2.000 años.

Lo que él quiere es nacer siempre. Ello requiere el fin de las causas de su ausencia.

Más contenido de esta sección
Israel liberará este lunes, a cambio de los rehenes entregados por el grupo islamista Hamás, a 1.968 prisioneros palestinos, de los cuales 154 serán deportados fuera del país, anunciaron las principales asociaciones que representan a los presos tanto por parte de Hamás como de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
La Convención Liberal aprobó las figuras de Alianza y Concertación de cara a las elecciones municipales del 2026, como también la adecuación del estatuto partido conforme a la ley de financiamiento político y una resolución de la Seprelad.
El Ministerio Público acompañó la extradición del ciudadano checo Petr Wolf, quien era requerido por las autoridades de la República Checa. El ex diputado checo permaneció prófugo en Paraguay durante nueve años.
La Dirección de Meteorología e Hidrología anuncia para esta semana un clima fresco a cálido para gran parte del país, como también ocasionales tormentas para Gran Asunción y otras ciudades y departamentos.
Tres personas perdieron la vida este domingo en dos accidentes de tránsito registrados en Edelira y Natalio, Departamento de Itapúa. Un tercer accidente se registró en San Rafael del Paraná, pero la mujer solo resultó herida.
El presidente francés, Emmanuel Macron, nombró este domingo por la noche el nuevo gobierno de su primer ministro centroderechista, Sébastien Lecornu, en el que destaca la entrada de funcionarios con perfil técnico en plena crisis política.