La discriminación solapada. Emi Kasamatsu. SERVILIBRO, 2023.
Escribe Line Bareiro sobre la obra.
Emi Kasamatsu nos lleva a un viaje a través del tiempo y recorriendo el mundo. Sobre cada uno de los temas y periodos de la historia humana que relata, se desplaza por ideas, culturas, pueblos del mundo, de una manera ya que no se limita a lo occidental y luego el Paraguay, sino que integra al Japón, a la China, a países africanos y asiáticos en diversos puntos de su recorrido.
A pesar de ser un trabajo erudito, es de fácil lectura, comprensible para un público amplio. Primero nos acerca a tradiciones religiosas judeo cristianas pero también de diferentes partes del mundo, incluyendo religiones indígenas del Paraguay.
En realidad, Emi recorre primero la construcción de la desigualdad a la mitad de la humanidad, a las mujeres. Ha sido un camino desde las religiones, pero también desde otros lugares de poder. Nos muestra también cómo en algunas culturas se preservó la igualdad de las mujeres o un lugar que no fuese el relegamiento a la ignorancia y el espacio privado. Pero claro, nos lleva también a un recorrido emancipatorio alrededor del mundo y del Paraguay,
Emi es paraguaya y es japonesa, es escritora y es investigadora, tiene amplios reconocimientos institucionales y también forma parte de organizaciones que luchan y construyen igualdad. Es quizás por eso que puede desplazarse con fluidez en roles de las mujeres, gobiernos de mujeres en épocas ancestrales, la constitución y afianzamiento del poder masculino, las mujeres en la colonización de las Américas y las respuestas de las mujeres por su libertad, por su igualdad, por su inclusión plena.
Kasamatsu nos habla del fin de una cultura y cómo se impone otra y también recorre la historia de las mujeres en el Paraguay, que llega hasta la historia de las luchas emancipatorias en nuestro país.
Me sorprendió que, para entrar a la perspectiva de género, que sirve para analizar justamente las cuestiones abordadas, inicie el capítulo relatando sobre la ideología de género inventada para descalificar una comprensión científica de una parte de los problemas de la sociedad.
La perspectiva de género nunca pretendió prohibir ninguna otra teoría, nunca fue absoluta, sino que tiene la capacidad de explicar una forma de relaciones humanas, que está transformando la vida y la convivencia en las sociedades humanas.