La Contraloría General de la República (CGR) remitió al Ministerio Público dos reportes con indicios de hechos punibles detectados tras auditar la entidad estatal Petróleos Paraguayos (Petropar). Una de las irregularidades detectadas señala una multimillonaria diferencia de más de un billón de guaraníes hallada en los informes de ingresos declarados por la petrolera.
Las irregularidades señaladas corresponden al ejercicio fiscal 2022, es decir, durante el mandato del gobierno anterior, donde estuvieron como titulares de Petropar, Denis Lichi (actual gobernador de Cordillera) hasta octubre, y luego Pedro Román.
“De la comparación realizada entre el saldo total devengado expuesto en la ejecución presupuestaria de ingresos, correspondiente al ejercicio fiscal 2022, de G. 4.862.250.035.124 y el saldo total expuesto en el listado detallado de ingresos de cobranzas, según comprobantes de G. 3.578.712.487.727, se constató una diferencia de G. 1.283.537.547.397 (guaraníes un billón doscientos ochenta y tres mil quinientos treinta y siete millones cuatrocientos ochenta y siete mil quinientos treinta y siete)”, dice parte del informe de la CGR.
Los auditores señalaron aspectos incumplidos de la Ley de Administración Financiera del Estado, así como los documentos solicitados sobre el caso a Petropar que no fueron contestados. Una explicación planteada fue que la diferencia corresponde a las “ventas no cobradas que se irán regularizando en el transcurso del periodo 2023”.
La evaluación de la Contraloría sobre el descargo planteado por Petropar señala que la respuesta no se adecua a lo cuestionado, ya que la diferencia viene de los informes de cobranzas, no de operaciones, por lo que el equipo auditor se ratificó en su observación.
Otros casos. Además del caso señalado, la CGR observó otras irregularidades, como el pago de casi G. 300 millones por reparar un camión en desuso y ya desmantelado hace dos años; así como la desaparición de 958 unidades de máquinas expendedoras de combustibles que valen G. 40.000 millones.
Otra denuncia tiene que ver con el pago de G. 2.233 millones por ítems no cumplidos dentro de un contrato de construcción de tanques de almacenamiento de combustibles adjudicado a la empresa Taller Industrial del Este SA.
También figuran ventas irregulares de combustible a precio por debajo de lo establecido por resolución de la propia empresa estatal. Los casos son venta de Diésel Mbarete inferior al precio establecido por G. 789 millones, Nafta Kape 88 por G. 21 millones, Nafta Oikoite 93 por G. 1.103 millones, y Nafta Aratirí 97 por G. 136 millones.
También fue señalado el pago por trabajos inconclusos en instalación de nueva línea de molienda en la planta de Mauricio José Troche por G. 41.815 millones, así como pago de anticipos en dicha obra por G. 39.059 millones.
41.815 millones pagó Petropar por trabajos inconclusos de la nueva línea de molienda en Mauricio José Troche.
39.059 millones pagó de anticipo Petropar a la empresa que no culminó los trabajos en la planta en Troche.
300 millones de guaraníes pagó Petropar por un camión que estaba en desuso y ya desmantelado hace dos años.
40.000 millones de guaraníes valen las 958 máquinas expendedoras de combustible desaparecidas en petrolera estatal.