Italia se apresta a recordar mañana al tenor Luciano Pavarotti, un año después de su muerte evocando su mayor legado, la lírica, que supo popularizar a través de su voz privilegiada.
El mundo se despertó el 6 de septiembre con la noticia de la muerte de Pavarotti, a los 71 años, debido a un cáncer de páncreas que padecía desde 2006, dejando así a Italia huérfana de uno de sus más importantes embajadores de la cultura.
Ahora, un año después, la ciudad que le recordará con mayor emoción será su Módena (norte) natal, mientras los homenajes internacionales se han previsto para el que sería su cumpleaños, el 12 de octubre.
Hijo de un panadero del Ejército aficionado al “bel canto”, utilizó su fama como cantante lírico para sacar la ópera a la calle con conciertos en parques y estadios, junto a los tenores españoles Plácido Domingo y José Carreras, lo que le granjeó las críticas de los puristas.
Además, no dudó en actuar junto a exponentes de la música pop, y en 1993 organizó el primero de sus conciertos benéficos Pavarotti & Friends, que pasó a ser una cita anual con artistas como Elton John o Bono (U2). EFE