La Itaipú Binacional (IB) informó que se estima que la producción llegará apenas a 67.000 GWh de producción de energía en este año, muy por debajo de los 75.134 GWh de energía garantizada de la central. Será la peor producción desde 1994, fecha en que la hidroeléctrica aún operaba con 18 unidades generadoras, cuando llegó a 69.394 GWh.
Ya en la semana Itaipú había detallado que suministró al Paraguay 13.979 GWh de energía eléctrica de enero a noviembre de este año. Al mismo tiempo, precisó que generó apenas 60.994 GWh en total en el 2021. Por si fuera poco, el año pasado había tenido la más baja producción en 25 años a causa de la prolongada sequía, llegando a 76.382 GWh.
Este mes, las lluvias estuvieron por debajo del promedio histórico y por esto se demora la recuperación en producción de energía, según explicó el superintendente de Operación de la Dirección Técnica, Margen Derecha, Ing. Hugo Zárate. “En respuesta a ese déficit de precipitaciones, los caudales del río Paraná y sus afluentes aguas arriba a la central volvieron a registrar valores por debajo de sus promedios históricos para el mes de noviembre”, agregó.
POCA AGUA. De hecho, el director general paraguayo de Itaipú, Manuel María Cáceres, ya había confirmado que se enfrenta la peor sequía en casi 100 años de registro, reconociendo que existe un proceso de cambio climático que afecta al caudal del Paraná.
Es más, la Superintendencia de Operación de la Dirección Técnica de Itaipú, lado paraguayo, había respondido a ÚH en noviembre que no se llegó a la situación actual de un día a otro. “Hace aproximadamente una década, se vienen registrando precipitaciones acumuladas por debajo del promedio (...). En consecuencia, a lo largo de este tiempo los embalses aguas arriba de Itaipú han presentado una tendencia decreciente en sus cotas. Ocurre que este año se alcanzaron niveles críticos de almacenamiento”, informaron los técnicos de la IB.
Además, Zárate no espera una “recuperación significativa” en el corto plazo e inclusive para el año 2022, por lo que consecuentemente la producción seguirá siendo baja. “Esto se debe a que la situación de almacenamiento de la región sureste y centro oeste del Brasil aún se encuentra en estado crítico, provocado por las escasas lluvias registradas en los últimos 2 años y medio, de modo que las precipitaciones que ocurran serán probablemente utilizadas de manera prioritaria para recuperar los niveles de almacenamiento”, explicó el ingeniero.
No obstante, añadió que en el 2022 se estima una producción superior a la de este año, aunque la dependencia de las precipitaciones “obliga a efectuar revisiones periódicas de las expectativas”.
67.000 GWh es la producción estimada de energía que alcanzará Itaipú al cierre de este año, menor a la garantizada.
