“Esto no es algo que se vaya a concluir en dos o tres días, porque se habla de lo que va a suceder en Gaza desde un punto de vista civil, desde un punto de vista de seguridad y muchos otros aspectos”, dijo Heskel en una rueda de prensa con medios internacionales.
La viceministra explicó que mantiene una “actitud positiva” respecto a las negociaciones que se están desarrollando en Doha, a donde acudió ayer una delegación israelí, e insistió en que Israel aboga por una propuesta de Estados Unidos de alargar durante las fiestas del Ramadán y la Pascua judía la primera fase del alto el fuego, que acabó hace más de una semana sin acuerdo para la siguiente.
Dicha delegación, según medios israelíes, no tiene la capacidad de negociar un fin de la guerra, que es lo que demanda Hamás, que aboga por que se pase a la segunda fase del acuerdo ya pactado en enero que lleva a la retirada de las tropas israelíes de Gaza y un alto el fuego permanente.
“El día después es de lo que estamos hablando ahora en la segunda etapa”, dijo Heskel, que añadió que en ella Israel necesita asegurar “la seguridad y la protección” de su pueblo.
“Es bastante obvio que las ideas de los países árabes están muy lejos de eso, porque si se deja a Hamás en el poder, es solo cuestión de tiempo hasta que vuelva a tener control civil y militar”, dijo la viceministra, para la que hasta ahora las visiones de los países árabes y la de EEUU “no se alinean”.
Heskel afirmó que las encuestas a día de hoy dan la victoria a Hamás en Cisjordania ocupada, lo que para la vicepresidenta “significa que solo es cuestión de unos pocos años hasta que Hamás vuelva al poder en Gaza”.
Puede leer: Hamás dice que “reiteradas amenazas” de Trump alientan a Netanyahu a incumplir acuerdo
“Tenemos que mirar a la realidad a los ojos si queremos encontrar una solución en la que los palestinos puedan vivir junto a los israelíes”, dijo, con el fin de construir, añadió, “una coexistencia real”.
Heskel celebró también la propuesta del presidente estadounidense, Donald Trump, de desplazar a los dos millones de gazatíes y la calificó de “un claro ejemplo de pensar de forma innovadora y que las viejas suposiciones, las viejas fórmulas, han demostrado ser erróneas”.
Y preguntada por si hay algún otro país, aparte de Jordania, que esté dispuesto a recibir refugiados palestinos de acuerdo al plan de Trump, Heskel no respondió directamente, pero criticó que los países europeos, así como Egipto, Catar, Irak o Irán, acogieran a refugiados sirios, ucranianos o afganos, y no a palestinos. "¿Qué tienen los palestinos para que se nieguen?”, se preguntó.
Fuente: EFE.