Robert Figueredo | Caaguazú
El suceso se registró luego de que desconocidos ingresaran a la farmacia propiedad de su esposa en horas de la madrugada de este jueves, forzando una de las puertas y llevándose la suma de G. 1.000.000.
“Realicé seis llamadas telefónicas a la comisaría de la ciudad entre las 5.50 y las 6.40 para que acudan a la escena del hecho. En todas las llamadas el suboficial Jorge Porfirio Sanabria Cañete se hizo del desentendido y, cuando llegó, luego de una hora, me respondió evasivamente a las preguntas sobre la tardanza”, dijo Chávez.
Agregó que entre la comisaría y el local de la farmacia existen 300 metros de distancia. Por otro lado, el titular del ejecutivo comunal expresó su impotencia ante lo que calificó de tamaña irresponsabilidad del uniformado.
“Si de esta manera actuaron conmigo, no me quiero ni imaginar lo que será con ciudadanos comunes. Preferí quedarme sin la protección de esta clase de policías, por eso le tuve que echar de mi casa”, argumentó finalmente Chávez, resaltando que de victima pasó a ser, supuestamente, victimario.
Versión del policía
Por su parte, el suboficial Sanabria dijo que Chávez lo agredió verbalmente y luego físicamente con golpes a a la altura del pecho, lo que sucedió, supuestamente, en la oficina de guardia de la unidad policial.
Todo esto habría ocurrido alrededor de la 6.40 de la mañana del jueves, en pleno centro de la ciudad de San José de los Arroyos, cuando los uniformados pretendieron ingresar a la casa del intendente que da con el local supuestamente visitado por ladrones, según los datos.
El personal policial afectado fue atendido en el centro de salud local.