Las facciones armadas palestinas rechazaron, en la línea ya expresada por el grupo islamista Hamás, la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para Gaza que establece una fuerza internacional en la Franja y reiteraron el derecho del pueblo palestino a “la resistencia y a la autodefensa”
En un comunicado difundido en sus redes, las facciones palestinas consideran que la fuerza internacional recogida en la resolución, a la que se encomienda la misión del desarme de las milicias palestinas, es “un instrumento de tutela y una complicidad internacional en el exterminio” del pueblo palestino.
Existen decenas de facciones armadas palestinas, pero las más destacadas son las Brigadas Al Qasam (brazo armado de Hamás), las Brigadas al Quds (brazo armado de la Yihad Islámica), las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa (brazo armado de Fatah), el Frente Popular para la Liberación de Palestina y las Comités de Resistencia Popular.
Su reacción se produce después de que la ONU aprobara, con 13 votos a favor y la abstención de China y Rusia, un plan para Gaza siguiendo la línea del alto el fuego ideado por Donald Trump, que establece una fuerza internacional a desplegar en la Franja que velará por el proceso de desmilitarización y desarme de los grupos armados, protegerá a los civiles y capacitará una nueva fuerza policial palestina.
ADMINISTRACIÓN IMPUESTA. En su comunicado conjunto, estas milicias afirman que esta fuerza, en la forma propuesta, “se convertirá en una forma de tutela o administración impuesta” y “atenta contra el derecho de los palestinos a la autodeterminación y su legítima aspiración a obtener su soberanía nacional”.
Las facciones creen que, al estar coordinada con Israel y servir como un aparato de seguridad, no será de protección internacional, sino una “fuerza de ocupación extranjera”. EFE