La fiscala del caso, Daisy Sánchez, se constituyó en el lugar donde fue encontrado el cuerpo de Jovany Fernández Benítez y ordenó una limpieza del lugar. Los investigadores encontraron un martillo a 14 metros del punto donde fue hallado el cadáver, en el asentamiento Kokueré.
Según informó el Ministerio Público, el martillo será objeto ahora de un análisis comparativo para determinar si efectivamente fue utilizado para matar al joven de 17 años.
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Para la Fiscalía, el caso está proximo a cerrarse. Emilio Damián Amarilla, alias Emilio’i (21), ya fue imputado por la fiscala Sánchez por homicidio doloso. Se trata del principal sospechoso de haber cometido el crimen.
La pesquisa apunta a que el móvil del homicidio fue el robo del celular de Jovany, que posteriormente fue vendido por 20.000 guaraníes, de acuerdo con los datos recabados por los investigadores. Otras tres personas, que compraron el teléfono móvil de la víctima están imputadas por reducción.
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El caso generó una gran conmoción en los pobladores, por lo que una gran cantidad de personas se manifestaron el jueves frente a la Fiscalía de Itá solicitando justicia, mientras el presunto homicida declaraba.
Según el informe forense, la muerte del adolescente fue por traumatismo de cráneo encefálico, debido a los golpes que habría sufrido con un objeto contundente.