“A dos años del Gobierno Peña la lucha es por una democracia radical con justicia social. Las fuerzas políticas, sociales, consecuentes con una verdadera democracia participativa hacia la construcción de un Paraguay con Justicia social debemos asumir la tarea y el compromiso de detener el creciente autoritarismo, la corrupción, la impunidad, el crimen organizado y cambiar este modelo de alta concentración de la riqueza, con altos niveles de pobreza, extrema pobreza y desigualdad social”, enfatizaron.
Para el FG, además de la falta de acciones, el Gobierno ha tomado decisiones erradas. “En estos dos años del gobierno de Santiago Peña, que no solo no han combatido los puntos que denunciamos, se han deteriorado por políticas erradas, por deliberada omisión y por complicidad favorables al cartismo, grupo político y económico actualmente dominante en la oligarquía local”, indicaron.
“El deterioro de la democracia es responsabilidad de gobiernos, que como el de Santiago Peña, no responden a las necesidades de las familias trabajadoras, campesinas e indígenas; la salud y la educación están en su punto más crítico de abandono; más del 60% de informalidad laboral y el abandono a la agricultura familiar campesina; el aumento incontrolado de los productos de la canasta básica, de productos que han empeorado la vida de miles de compatriotas”, subrayan.
Instaron a que el actual estado de cosas sea revertido mediante una alternativa política al modelo de exclusión social. “Los sectores sociales y populares deben retomar un proceso de luchas e instalar un programa de fortalecimiento de las pequeñas y mediadas empresas, la industrialización, la soberanía y la reorientación de la política exterior; el cumplimiento de las leyes laborales, la lucha por la tierra y la reforma agraria por los derechos de las mujeres y el cese de la persecución a los pueblos indígenas”, agregaron.
Consideran preciso que en la oposición cesen los recelos y “que deben terminar de victimizarse y comprometerse con un programa común”.