“El triunfo deja una alegría tremenda, ganarle al rival de siempre significa mucho, no solamente los puntos, sino por la rivalidad, la gente que vino, cantó, vibró. A mí me gustó. Fue un lindo espectáculo”, expresó Almeida en conferencia de prensa.
Sobre el trámite del partido, el DT explicó: “El rival tiene un juego distinto al nuestro. Tuvieron más la pelota, pero no pudieron hacernos daño, se acercaron con algunos tiros libres”.
“En la segunda parte hicimos una modificación táctica que resultó. Mandamos a Julián Benítez sobre Riveros, quien era la salida del rival, y cuando perdían la pelota, jugamos a su espalda, lo que obligó a salir a un central y allí quedaron mano a mano con nuestros delanteros”, agregó el adiestrador decano.
Consultado sobre la actitud del equipo desde que llegó el cuerpo técnico liderado por Éver Almeida, el experimentado entrenador contestó: “Creo que tuvimos una aceptación del grupo, de los jugadores, que trabajaron duro para entendernos”.