La senadora Esperanza Martínez lanzó agudas críticas al manejo cartista en este Gobierno y le valió el rechazo sobre un pedido de tratar un proyecto sobre el salario mínimo, el 27 de agosto. El presidente del Congreso Basilio Bachi Núñez hizo la señal a su bancada, que fue vista en vivo, y la moción de preferencia no tuvo votos.
Martínez impulsa un proyecto de ley para cambiar la forma de calcular el reajuste del salario mínimo, basado en la suba de precios de alimentos, y no en el índice general, y criticó que un día antes, Santiago Peña, haya hecho un discurso lamentando los altos precios del mercado, pese a los bajos ingresos cuando el mismo presidente tiene intereses financieros.
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“Se defiende el mercado, pero sabemos de la injerencia de la familia del presidente de la República en los negocios financieros, en las compras públicas, en la obligación de afiliarse al Partido Colorado para ocupar cargos públicos y una serie de cosas que demuestran que el presidente de la República no se ocupa de todos los paraguayos ni defiende los intereses de la mayoría”, sentenció la legisladora de Participación Ciudadana, que perdió la votación por sus dichos.
Esperanza fue tajante al señalar que el cartismo comenzó un proceso desde el inicio de este Gobierno que destruyó la institucionalidad, en referencia a que las reglas se adaptaron a la mayoría abusiva, sin respetar las normas y la prueba máxima es el caso de Kattya González, que fue expulsada sin causales y para lo cual se tuvo que usar un reglamento viejo porque el vigente les exigía una cantidad de votos que no alcanzaban.
“Desde que comenzó este Gobierno nuestra crítica a la bancada mayoritaria y al cartismo como fuerza política dentro del Partido Colorado es haber instalado una mayoría abusiva que viene a cambiar las reglas de juego de acuerdo con sus intereses y no se mantiene una institucionalidad”, destacó.
El diciembre del 2023, el cartismo impuso un reglamento que exigía 30 votos para la pérdida de investidura, con intención de blindarse ante una eventualidad, pero en febrero del 2024 ignoraron su misma iniciativa y recurrieron a la Constitución, que habla de una mayoría simple de 23 votos.
Martínez criticó que a Kattya se la haya juzgado y a Noelia Cabrera, la liberocartista con dos sobrinos planilleros sea perdonada. "¿Con cuál regla vamos a pedir la destitución? ¿Cuál es el Senado que debe decidir? ¿Cuál es el reglamento?”, preguntó.
“El cartismo instaló una mayoría abusiva que viene a cambiar las reglas de juego de acuerdo con sus intereses y no se mantiene una institucionalidad”.
Esta pérdida de institucionalidad, según Esperanza, le valió el castigo de la mayoría que rechazó estudiar su proyecto del salario mínimo por criticar al cartismo.
“Por eso me castigaron y no me dieron el voto para el tratamiento de un proyecto, o usted cree que no me doy cuenta, ‘no voten a Esperanza porque recién habló mal del partido Colorado’, eso no es institucionalidad”, reprochó.
La senadora anunció que seguirá luchando por la ley del salario y que va a solicitar su tratamiento por mesa directiva.
“A ustedes no les interesa debatir cómo se puede mejorar el salario mínimo, pero hicieron un castigo político porque hablé mal del Partido Colorado, pues coños, si así va a funcionar este Parlamento, ¡pobre Paraguay! El salario mínimo es mucho más importante que los nepobabies que van a continuar en este lugar y en otros lugares. En este Estado que no respeta nada”, subrayó.
La parlamentaria sostuvo que los colorados continúan con nepobabies y planilleros y que la nueva ley de la función pública no sirve para corregir esas prácticas porque nadie ingresa por concurso, sino a través de la Asociación Nacional Republicana (ANR).
"¿Es transparente el ingreso a la función pública? Los ciudadanos son obligados a ser afiliados al partido por eso presentaron un millón de nuevas afiliaciones porque le tienen subyugados a los funcionarios. Si no votás, y no le traés a tu familia, no tenés los beneficios. Hagamos la comparación de afiliados y veamos dónde trabajan, cuántos trabajan en la función pública, reciben becas de Itaipú y Tekoporã", concluyó Esperanza.