Las autoridades sanitarias del país acordaron ayer que la mascarilla deje de ser obligatoria en cualquier centro de salud y en farmacias, aunque la entrada en vigor de esta medida queda pendiente de que la próxima semana el Gobierno publique la correspondiente norma.
La eliminación definitiva de la obligatoriedad de llevar esta protección contra el coronavirus fue acordada en una reunión entre el Gobierno central y los regionales, según confirmaron a EFE fuentes del denominado Consejo Interterritorial de Salud.
No obstante, las autoridades en salud coincidieron en recomendar que se mantenga su uso cuando haya síntomas de infección respiratoria y para pacientes inmunodeprimidos o en zonas como quirófanos y unidades de cuidados intensivos.
La obligatoriedad de uso de las mascarillas, al inicio de la pandemia en 2020, se fue flexibilizando a medida que bajaban los contagios del virus y el pasado febrero España puso fin a su obligatoriedad en transportes públicos, con los registros de Covid en sus cifras más bajas, al igual que ahora.
Otros países europeos habían eliminado antes la obligación de llevarla en espacios como el transporte público.
Según datos oficiales, en España el Covid-19 ha provocado cerca de 121.000 fallecidos y casi 14 millones de contagios. EFE