En medio de incidentes se inició finalmente ayer el censo de funcionarios de la Municipalidad de Ciudad del Este, que busca determinar qué función cumple cada funcionario, permanente y contratado, que llamativamente desde la semana pasada literalmente abarrotan cada dependencia comunal.
El concejal Celso Kelembu Miranda acompañó a los funcionarios que al saber que el censo sería en el polideportivo municipal se manifestaron frente al Departamento de Recursos Humanos, reclamando la disposición a la directora, la abogada Yolanda Paredes.
El edil llegó al colmo de agredir físicamente al funcionario Aldo Barrios, que acompaña el trabajo de la directora y que forma parte del equipo de confianza que se instaló en la institución municipal. Paredes dijo que también le intentó agredir y lamentó la tibia actitud de la Policía Nacional, que reforzó la cobertura después del incidente.
“Miranda intentó agredirme, yo estaba con el comisario Sosa, incluso me amenazó que se va a ir hasta a mi casa a pegarme (...). Vamos a pedir una medida judicial para que este señor no pueda acercarse más a esta institución y también a mi casa”, dijo.
Tras dialogar con los manifestantes, finalmente se acordó que el censo se realizaría en cada dependencia. Se aclaró que la intención inicial, de realizar el censo en el Polideportivo, no era para todos, sino para los 1.300 contratados en los últimos 3 meses. Paredes explicó que la idea era evitar sobrecargar toda la institución y entorpecer la normal actividad.
Sobre el cuestionamiento de Miranda, quien la trató de extraña, porque decidió no percibir su salario, dijo que es una decisión personal. “Javier Zacarías fue asesor ad honórem por años y nadie dijo nada, pero él podía porque era el rey del Edén”, lamentó.
EL PROBLEMA. “Yo puedo renunciar si quiero, es algo voluntario, por favor. Lo único que falta es que me obliguen a aceptar dinero del Estado. No quiero dinero de la ciudadanía y punto. Si recibía salario, igual me iban a cuestionar porque recibí plata de la ciudadanía, ahora porque no recibo también, el problema acá es mi presencia”.
Paredes insistió que era de esperarse y que la cuestión de fondo es que no la quieren en la institución. “Pero lo siento mucho, qué vamos a hacer. El censo es algo que se tiene que hacer, porque la ciudadanía paga por sus servicios y como no van a trabajar, no quieren marcar tarjeta, no quieren llegar a hora, no quieren trabajar, solo quieren salir a tomar tereré bajo los árboles”.
La directora de RRHH lamentó y dijo que lo que se pretende es imposible. “La ciudadanía tiene que saber a quién se le está pagando más de G. 6.000 millones al mes y eso es plata que salió del bolsillo del ciudadano”.
Explicó que el ciudadano no va a querer venir a pagar sus registros, sus patentes, sus compromisos tributarios con el Municipio si no se tiene con claridad a donde va a parar, es dinero que aporta. “Recorriendo cada dependencia municipal es fácil constatar el hacinamiento que hay en esta institución”.
ADMINIsTRADOR. Paredes aseguró que no se puede no hacer el censo, es un derecho que tiene el intendente municipal Miguel Prieto de saber con qué recurso cuenta en cuanto a plantel de funcionarios. “Lo que pasa es que hay un nuevo administrador y tiene que saber a quién le va a pagar y a quién no. Porque en caso de hacerlo en forma indebida también tiene responsabilidad penal y civil, entonces nosotros tenemos que cubrirnos. Por más que trabaje ad honórem, pero soy nombrada por resolución, soy funcionaria pública y desde el momento que también no cumplo con mis obligaciones, también puedo ser demandada”, expresó.