15 ago. 2025

El apoyo de Obama al diálogo con las FARC da un giro a la relación Colombia-EE.UU.

Bogotá, 7 dic (EFE).- El diálogo entre el Gobierno de Colombia y las FARC ha dado un vuelco a la relación de este país con Estados Unidos, y así se demostró durante el encuentro que mantuvieron los presidentes Juan Manuel Santos y Barack Obama el pasado martes, cuando éste último respaldó sin fisuras ese camino hacia la paz.

El presidente de EE.UU., Barack Obama (d), con el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos (i), durante su encuentro en el Despacho Oval de la Casa Blanca, en Washington (EE.UU.), el 3 de diciembre de 2013. EFE/Archivo

El presidente de EE.UU., Barack Obama (d), con el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos (i), durante su encuentro en el Despacho Oval de la Casa Blanca, en Washington (EE.UU.), el 3 de diciembre de 2013. EFE/Archivo

Desde finales de los años noventa, la agenda entre los Ejecutivos de los dos países ha estado marcada por una cooperación militar que llegó a su punto álgido a partir de 2001, cuando se implementó el Plan Colombia.

Por ese acuerdo, que firmaron los presidentes Andrés Pastrana (1998-2002) y Bill Clinton (1993-2001), pero que implementaron sus sucesores, Álvaro Uribe (2002-2010) y George W. Bush (2001-2009), Estados Unidos entregó a Colombia unos 8.000 millones de dólares en ocho años para la lucha contra la guerrilla y el narcotráfico.

El Plan Colombia se tradujo en una modernización sin precedentes de las Fuerzas Armadas del país suramericano y en importantes resultados militares en el campo de batalla contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Fueron años de guerra sin cuartel que dejaron varios millones de víctimas y desplazados forzosos, especialmente en las zonas rurales, pero también una mejora de la seguridad en las ciudades y una guerrilla diezmada que, tras la llegada al poder de Juan Manuel Santos, en 2010, aceptó negociar.

“El paso hacia la paz fue el correcto”, expresó Obama tras recibir en la Casa Blanca a su homólogo colombiano, a quien felicitó por sus “audaces y valientes esfuerzos para lograr una paz duradera” mediante el diálogo con las FARC que ya ha cumplido un año en Cuba.

Obama dio de esta manera un respaldo frontal a un proceso que en Colombia rechazan las fuerzas más conservadoras lideradas por el expresidente Uribe, y por consiguiente alentó a Santos, quien hace sólo unos días anunció que se presentará en 2014 a la reelección.

Aún así, el inquilino de la Casa Blanca reconoció que esta negociación “no es fácil, hay muchos desafíos por delante”, para después reconocer Santos que el apoyo de Obama y de la comunidad internacional será “decisivo” para que el proceso de paz sea exitoso.

Lo que evidenció el encuentro entre los dos mandatarios es que la agenda bilateral cambió radicalmente. Ya no está basada en la cooperación militar.

Ahora se centra en la economía, a raíz del Tratado de Libre Comercio (TLC) que entró en vigor el año pasado, y en el desarrollo social de Colombia en ámbitos como la transferencia de tecnología o la creación de una red de fibra óptica.

Esa agenda además pasaría por una colaboración en la implementación de los acuerdos finales que surjan del diálogo con las FARC. En definitiva, el gran reto.

EE.UU. tiene especial interés en los acuerdos que surjan sobre el problema de las drogas ilícitas y el narcotráfico, punto en el que están centrados en este momento los negociadores en La Habana.

Y es que las millonarias ayudas estadounidenses que ha recibido Colombia desde 2001 se han dirigido a combatir ese flagelo, que, según los dos países, ha sido la fuente de financiación de las FARC en su guerra contra el Estado durante las dos últimas décadas.

Estados Unidos pasaría así de surtir material militar e inteligencia, y de facilitar las fumigaciones con químicos sobre los cultivos ilícitos, a colaborar para que los productores y campesinos colombianos puedan comercializar sus productos, que ya no serían coca.

El presidente Santos está convencido de que “se van a tomar decisiones difíciles” y que el proceso de paz es “un desafío”.

Por eso su empeño, según reconoce, es ser reelegido para acabar con una guerra que desangra al país desde hace casi 50 años y evitar que en las elecciones de 2014 gane una propuesta política que dé al traste con este arriesgado proceso de paz.

Obama también lo tiene claro, ya que de lograrse un acuerdo con la principal guerrilla colombiana se abrirían unas posibilidades inimaginables de cooperación económica y social en el que durante años ha sido el principal socio de Estados Unidos en Suramérica.

Esther Rebollo

Más contenido de esta sección
El presidente argentino, Javier Milei, se refirió este jueves por primera vez a la crisis del fentanilo contaminado que ha dejado casi 90 muertos en el país y responsabilizó al kirchnerismo de haber encubierto al principal apuntado en la investigación, el dueño del laboratorio que produjo la droga.
Los rizos están de moda, pero no a cualquier precio porque la salud prima; de ahí, el éxito y recuperación de los ruleros que utilizaban las abuelas, unos cilindros que rizan, sin dañar el cabello, y además ofrecen un plus: el peinado dura más.
El Ministerio de Sanidad de Gaza registró cuatro nuevas personas fallecidas “por hambruna y desnutrición” este miércoles, dos mujeres y dos hombres, con lo que eleva a 239 el número de muertes por estas circunstancias desde que Israel empezó su ofensiva en el enclave palestino en octubre de 2023.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, deberá comparecer tres veces a la semana a partir de noviembre en su juicio por corrupción, según decidió este martes el tribunal que le juzga “por la necesidad de avanzar el juicio”, después de las recurrentes audiencias canceladas en los últimos meses por diferentes motivos.
Reporteros sin Fronteras (RSF) denunció este lunes el “asesinato” por el Ejército israelí de seis profesionales de los medios alcanzados por un bombardeo cerca del hospital al Shifa de Gaza en lo que considera un “ataque deliberado” contra el periodista de Al Jazeera Anas al-Sharif, acusado “sin pruebas” de terrorismo.
Una ola de calor “excepcional” por su intensidad azota a gran parte de Europa con temperaturas que se elevan por encima de los 42 grados en algunos puntos de Francia, Portugal, los Balcanes y España, y que ha puesto en aviso por riesgo extremo de incendios a muchas zonas del continente.