De acuerdo con el informe de la Contraloría General de la República, respecto a la ejecución del Presupuesto General de la Nación (PGN) 2024, la deuda pública per capita de Paraguay al cierre del año pasado ascendió a unos USD 2.842, lo que significa que representó hasta más de G. 20 millones para cada paraguayo.
Este monto representa un aumento de 29,3% frente al año anterior, cuando cerró en USD 2.197 o G. 15,5 millones, lo que equivale también a unos G. 4,8 millones más de deuda por cada habitante o un aumento interanual de USD 645.
Según el informe, los factores que influyeron en el aumento de la deuda per capita fueron la expansión de la deuda total del sector público, que llegó a USD 1.515,8 millones, además de la disminución en la cantidad de habitantes.
“El número de habitantes registrado en el año 2024 es menor que en el año 2023, con una diferencia de 1.182.173 personas. Esta reducción contribuye a que el saldo de la deuda pública se distribuya entre un número menor de ciudadanos, aumentando el endeudamiento individual”, explica a su vez.
Riesgos. Mientras tanto, advierte que este incremento individual de la deuda pública también podría derivar en implicaciones para los ciudadanos, como una mayor carga fiscal y una reducción de los servicios públicos.
“Para financiar la deuda, el Gobierno podría aumentar impuestos o reducir subsidios, afectando el ingreso disponible de las personas y su capacidad de consumo. (…). Si una gran parte del presupuesto se destina al pago de la deuda, sectores esenciales como salud, educación e infraestructura podrían recibir menos recursos, disminuyendo la calidad de vida”, afirma la Contraloría.
Estos cálculos estimativos de la deuda por persona provienen de datos proporcionados por la Dirección General de Crédito y Deuda Pública (DGCDP) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por otro lado, la Contraloría alerta también que el incremento de la deuda pública del país implica “riesgos significativos para la estabilidad macroeconómica”, como “presiones inflacionarias”, “desplazamiento de la inversión privada”, “menor crecimiento económico por mayor carga de intereses” y “imitación del Gobierno para la aplicación de reformas para mejorar la economía; entre otros”.
Ante esto, instó al Gobierno, especialmente al MEF, a fortalecer e implementar políticas fiscales “sostenibles que permitan gestionar prudentemente la deuda pública y mitigar sus riesgos”.
En el mismo informe, afirma que, pese a algunas medidas ya adoptadas por la cartera de Economía en busca de reducir el saldo de dicha deuda, no se logró revertir la tendencia ascendente y cerró con una tasa anual de aumento promedio de 12,7% en los últimos diez años.
“El análisis de los documentos recibidos en respuesta permite a la CGR exponer a pesar de los esfuerzos del Ministerio de Economía y Finanzas para contener el crecimiento de la deuda pública mediante medidas de consolidación fiscal al cierre del ejercicio fiscal 2024 descriptas anteriormente, se evidenció que la deuda pública continuó aumentando, especialmente en el ámbito de la Administración Central, donde se verificó una variación del 10% respecto al año anterior”, concluye la CGR.
Persiste fuerte concentración de los bonos soberanos
Por su lado, el informe de la deuda pública del Ministerio de Economía correspondiente a octubre revela que los bonos soberanos siguen representando la mayor parte del endeudamiento total del país, ubicándose en el 55,3% del total, levemente mayor que los meses pasados. En ese sentido, al décimo mes del año, los bonos alcanzaron un total de USD 8.118,7 millones, lo cual también representa aproximadamente el 46% de los compromisos de la Administración Central.
En cuanto a los créditos externos, los cuales comprenden el 41,5% de la deuda total, se siguen destacando como principales acreedores el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF).
