De acuerdo con el último informe del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), al cierre de julio de 2025 el déficit fiscal anualizado fue de 2,63% del PIB, lo que supone una mejora gradual respecto a los meses anteriores.
El economista Rodrigo Ibarrola sostiene que el Gobierno, principalmente gracias a las recaudaciones, tiene margen para alcanzar el objetivo del 1,9% este año, pese a que también, a siete meses, el déficit global se mantiene casi en los mismos niveles que el inicio del 2025, cuando se ubicaba en 2,9% del PIB.
“Yo creo que van a llegar a la meta. Tienen varias vías. Tené en cuenta que se está recaudando algo más que el año pasado (siempre sube) y además están recibiendo más fondos desde la binacionales. Y todavía (las autoridades) tienen la posibilidad de reducir el ritmo del gasto. Tienen todo a favor para llegar a la meta”, consideró.
En cuanto a la inflación, Ibarrola igualmente vaticinó el cumplimiento de la meta y recordó que el Banco Central del Paraguay (BCP) actualizó dicha meta, pasando del 4% al 3,5% este año, mientras que el horizonte de ajuste es de 18 meses.
“La inflación está controlada, que baje la inflación no quiere decir que los precios vayan a bajar de ahora en más, sino que ya no suban de manera constante por encima de lo proyectado. La tendencia es que suban, eventualmente pueden bajar temporalmente, como ahora por algún factor externo o ajeno al mercado, pero luego vuelve a su tendencia natural. Lo que vemos normalmente es una estabilización del incremento. También se busca que las variaciones a lo largo del año sean lo menos extremas posibles, pero se prevé que se llegue al 3,5% a más tardar el año que viene”, apuntó.
Mientras tanto, el ex ministro de Hacienda y analista Dionisio Borda fue menos optimista con relación al plan fiscal, ya que recordó que existen desafíos en cuanto a los gastos públicos, cuyos manejos no tuvieron cambios significativos en estos dos años.
Recordó que, según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el mal uso de los recursos en Paraguay provoca pérdidas equivalentes al 3,9% del PIB y cuestionó que el Poder Ejecutivo no haya presentado un plan para reducirlas. “Las prácticas clientelares y prebendarias no solo persisten, sino que han aumentado”, manifestó en una entrevista reciente.
