El censo agropecuario se hizo en el 2022 luego de 14 años, aunque la recomendación es de 10. El ministro de Agricultura y Ganadería, Santiago Bertoni, presentó ayer la radiografía definitiva del sector productivo del país con la presencia de varias autoridades, entre ellas, el presidente Mario Abdo Benítez, de quien se despidió con la expresión “misión cumplida”, haciendo referencia a la culminación del periodo de mandato del Gobierno actual.
Cifras. El hallazgo que más destacó es el aumento y consolidación de las fincas de entre 20 y menos de 1.000 hectáreas, ya que considera que las políticas aplicadas a este sector dieron el resultado esperado. Asimismo, la cantidad de campos muy grandes se estancaron o disminuyeron. “Da la pauta de que el grande creció a expensas del pequeño no es cierto, sino que hubo una transformación significativa del medio rural”, expresó.
En el otro extremo, se observa también un crecimiento de más del 50% de las fincas con menos de una hectárea y un comportamiento contrario en las que tienen entre una y menos de 20 hectáreas.
Aunque casi se mantuvo la cantidad de pequeños productores con 245.002, el análisis desagregado revela que la participación de las mujeres en las tareas rurales creció en un 75,6% respecto al 2008, pero también trabaja más fuera de su finca.
En cuanto a la superficie sembrada, Bertoni comentó que prácticamente todos los rubros tuvieron una importante variación positiva, como el caso de la soja, el maíz, el arroz y las hortalizas, en tanto que la mandioca, un producto estrella del campesinado, bajó casi 10%.
Tecnología y créditos. Respecto a hace 14 años, hay una mayor apuesta por la tecnología en las parcelas, en detrimento de herramientas manuales, cuyo uso cayó hasta en un 74%.
Como un obstáculo se presenta el acceso a créditos, teniendo en cuenta que solo 43.489 fincas pueden obtener préstamos en el sistema formal, lo que representa una baja del 15,2%.