Comienza la Cuaresma, tiempo de penitencia y de renovación interior para preparar la Pascua del Señor.
La verdadera conversión se manifiesta en la conducta. Los deseos de mejorar se han de expresar en nuestro trabajo o estudio, en el comportamiento con la familia, en las pequeñas mortificaciones ofrecidas al Señor, que hacen más grata la convivencia a nuestro alrededor.
No podemos dejar pasar este día sin fomentar en nuestra alma un deseo profundo y eficaz de volver una vez más, como el hijo pródigo, para estar más cerca del Señor.
Ahora se nos presenta un tiempo en el cual este recomenzar de nuevo en Cristo va a estar sostenido por una particular gracia de Dios, propia del tiempo litúrgico que hemos comenzado. Por eso, el mensaje de la Cuaresma está lleno de alegría y de esperanza, aunque sea un mensaje de penitencia y de mortificación.
El papa Francisco a propósito de la lectura de hoy dijo: “En el pasaje de Mateo, Jesús relee las tres obras de piedad previstas en la ley mosaica: La limosna, la oración y el ayuno. Y distingue el hecho externo del hecho interno, de ese llanto del corazón. Jesús pone de relieve una tentación (...) que se puede resumir precisamente en la hipocresía:
“Cuiden de no practicar su justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos. Cuando hagas limosna, no vayas tocando la trompeta por delante como hacen los hipócritas. Cuando recen, no sean como los hipócritas a quienes les gusta rezar de pie para que los vea la gente. Y cuando ayunen, no pongan cara triste, como los hipócritas”.
Sepan, hermanos, que los hipócritas no saben llorar, se han olvidado de cómo se llora, no piden el don de lágrimas.
Cuando se hace algo bueno, casi instintivamente nace en nosotros el deseo de ser estimados y admirados por esta buena acción, para tener una satisfacción.
Jesús nos invita a hacer estas obras sin ninguna ostentación, y a confiar únicamente en la recompensa del Padre que ve en lo secreto”.
(Frases extractadas de http://www.homiletica.org/francisfernandez/franciscofernandez0607.htm y https://www.pildorasdefe.net/liturgia/evangelio-Mateo-6-1-6-16-18-no-ser-hipocritas-orar-en-lo-secreto)