Detalló que en la primera evaluación del programa, la Contraloría ha revisado aleatoriamente 350 escuelas y ha recorrido las 15 gobernaciones encargadas del programa, encontrando tanto aspectos positivos como áreas de mejora, resaltando que, algunos de los problemas detectados incluyen deficiencias en infraestructura, como cocinas y utensilios inadecuados, así como una gestión deficiente de residuos.
Dijo que el Ministerio de Desarrollo Social señala inconvenientes con el Registro Único del Estudiante (RUE), cuyo programa depende del Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), con relación a que algunos padres no autorizan que sus hijos reciban las raciones, lo que genera discrepancias en la cantidad de alimentos entregados.
También destacó que el SIAE (sistema integrado de alimentación escolar), cuenta con desperfectos en su utilidad. “Este sistema debería de ayudar y agilizar para evitar deficiencias en el resultado, pero también es fundamental que los directores y profesores garanticen que los alimentos entregados sean adecuados y que la información se registre correctamente”, dijo.