Desde el miércoles, aproximadamente 150 campesinos de la FNC, se encuentran en la colonia instalados bajo carpas. La FNC movilizó a los labriegos para apoyar a sus pares, en la lucha por la tierra.
La colonia Guahory actualmente está dividida en dos, por el desacuerdo entre los campesinos sobre la propuesta de reubicación del Gobierno.
Es más, la comisión vecinal quedó acéfala; tras la renuncia de su presidente, el dirigente campesino Elvio Araújo.
Un grupo de familias, con acompañamiento de los labriegos de la FNC, decidieron tomar posesión de tierras en la colonia; mientras que otro grupo, liderado por Araújo, continúa negociando una salida con el Gobierno.
El dirigente campesino Eligio Brítez, manifestó a ÚH que la mayoría de las familias de la colonia no están a favor de la reubicación propuesta por el Gobierno.
Dijo además, que la FNC dirigirá la lucha por la tierra en la colonia.
A estos grupos, se suma el de los colonos de origen brasileño, que disputan con los labriegos las tierras.
Instigados. El presidente del Indert, Justo Cárdenas, dijo hace unos días en una emisora radial, que aquellos que “no quieren llegar a una solución, están siendo instigados por sectores políticos”.
Cárdenas directamente apunta a dirigentes de los partidos políticos de la oposición, como ser Efraín Alegre, titular del PLRA; el senador Luis Alberto Wagner, el diputado José Ledesma y el intendente de Tembiaporã, Sotero Cáceres.
“(...) ellos son los que se van a incitar a la esta gente, se niegan rotundamente a llegar a un acuerdo de carácter social. Ellos insisten en una expropiación, que es un bochorno, es una burla, realmente se expropia cualquier disparate”, había manifestado Cárdenas.
Denuncia. La FNC presentó días atrás una denuncia en el Ministerio del Interior, que refiere sobre la supuesta entrega de uniformes policiales a civiles brasileños.
Según expresó la secretaria general de la FNC, Teodolina Villalba, “para que ellos desalojen a los campesinos que están luchando por la tierra, como respuesta a que las instituciones no dan salida a la problemática (...)”.
Para la nucleación campesina, el problema y los conflictos por la tierra, nunca serán solucionados con medidas represivas, con desalojos y violencia.
La organización insta a las autoridades a dar una solución definitiva a los campesinos de Guahory, recuperando el asentamiento.
Ya el Ministerio del Interior, a través de un comunicado, negó la denuncia de los campesinos.
El pasado 15 de setiembre unas 200 familias campesinas fueron desalojadas violentamente en Guahory. Perdieron lo poco que tenían. Sus precarias viviendas fueron derrumbadas y hasta sus cultivos arrasados.
