El rezo fue liderado por el arzobispo de Manaos (Brasil), cardenal Leonardo Ulrich Steiner, quien animó a los creyentes congregados en la explanada del santuario a implorar por la paz a la Virgen.
“Pidamos a la Reina de la Paz que conforte, transforme el corazón de quienes alimentan el odio, la venganza, la destrucción, la muerte... y que se instaure la fraternidad, la hermandad, que la guerra acabe y que los militares regresen pronto a sus casas”, dijo.
“Sí, que eso ocurra –continuó– que se silencien las armas que generan la muerte, que se extinga la violencia en el corazón humano. Concede el don de la paz, toca el corazón y las mentes de los gobernantes para caminar por los senderos de la fraternidad y la paz”.
Esta oración se produce en medio de una escalada del conflicto en Oriente Medio, donde Israel lleva a cabo ofensivas en Gaza y el Líbano y donde ha aumentado la tensión con Irán, mientras continúa la guerra en Ucrania tras la invasión rusa.
Por otro lado, el arzobispo también exhortó a los peregrinos a rezar para que los pobres sean integrados en la sociedad y no sean rechazados, y para que los migrantes sean acogidos en las comunidades y no apartados.
La peregrinación de octubre conmemora la aparición de la Virgen ocurrida el 13 de octubre de 1917 ante tres niños pastores en la cueva de Iria, en Fátima, a unos 130 kilómetros de Lisboa.