Por tercera vez se repite el abandono voluntario de campesinos de las tierras en litigio. Esta vez en menor cantidad en comparación a procedimientos anteriores. Los sintierras quedaron con sus pertenencias en una propiedad ubicada frente a la enorme superficie trabajada por los menonitas de Campo 9. Son alrededor de 110 productores de la Colonia Sonmerfeld los que se ven afectados por la ocupación.
La orden de captura de los 4 dirigentes desinfló el espíritu de los ocupantes que se quedaron prácticamente sin lideres para llevar adelante la ocupación. De hecho que la decisión dada a conocer la pasada semana por el presidente del Indert, Mario Vega, sobre la legalidad y validez de los títulos de propiedad exhibido por los menonitas provocó el abandono de varios ocupantes que comenzaron a ver como una causa sin contenido ni respaldo jurídico para la meta de contar con un pedazo de tierra para trabajar.
Luego de discusiones sobre posturas asumidas en defensa de sus representados, los abogados Jorge Do Santos (campesinos) y Adán Espínola (menonitas) se llegó a un acuerdo de abandono pacífico de los ocupantes diseminados en toda la extensión de las 20.000 hectáreas.
Ardua tarea en la negociación le cupo al director de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, Hugo Samaniego. En todo momento se buscó un punto de equilibrio para una salida consensuada. RF