El ministro boliviano de Defensa, Rubén Saavedra, declaró hoy a medios estatales que “bajo ninguna circunstancia se avizora” que la decisión de Paraguay o de cualquier otro país de mejorar sus unidades militares fronterizas “implique un riesgo de conflicto”.
“Tanto Paraguay como Bolivia somos pacifistas, así lo hemos declarado. El pueblo boliviano y el pueblo paraguayo están unidos por una hermandad, no avizoro ningún elemento de conflicto”, agregó.
El Gobierno paraguayo anunció el pasado miércoles que en esta gestión destinará recursos para fortalecer el funcionamiento de las bases militares de sus fronteras y además una comisión de defensa dictaminará si se debe renovar el arsenal militar.
El ministro boliviano insistió en que mejorar unidades militares de la frontera es un asunto rutinario y destacó que su ministerio y su homólogo de Paraguay “tienen un flujo de información importante” en los “términos de mayor respeto y cordialidad”.
Saavedra también dijo que Bolivia está equipando el sector de los transportes de sus Fuerzas Armadas y hará una compra de helicópteros para apoyar emergencias y la lucha contra el narcotráfico, pero ello “no tiene ningún sentido, o intención de carácter militar o bélico”.
“Bajo ninguna circunstancia Bolivia estaría empeñada en una carrera armamentista respecto a ninguno de nuestros vecinos”, apuntó.
Bolivia y Paraguay se enfrentaron en la guerra del Chaco en el período 1932-1935, que costó la vida de 100.000 personas y a los bolivianos además la perdida de parte de su territorio.