Trump, el gran favorito para la nominación presidencial republicana, afirmó en varios mítines que los migrantes que entran de forma ilegal “están envenenando la sangre” del país, lo que le ha valido comparaciones con Adolf Hitler y el fascismo.
La Casa Blanca lo condenó varias veces, pero Biden ha dado un paso más, reprochándoselo en un discurso en el que se mostró combativo.
Trump “llama alimañas a los que se oponen a él. Habla de la sangre de los estadounidenses que está envenenada, haciéndose eco exactamente del mismo lenguaje utilizado en la Alemania nazi”, afirmó en el estado de Pensilvania.
El ex presidente “ha publicado con orgullo en las redes sociales las palabras que mejor definen su campaña de 2024”, es decir, “venganza”, “poder”, “dictadura”, añadió.
“No hay confusión sobre quién es Trump y qué pretende hacer”, declaró en el mitin, previsto en principio para ayer en coincidencia con el tercer aniversario del asalto al Capitolio de 2021, pero se adelantó un día por una inminente tormenta invernal.
El ex presidente republicano “está dispuesto a sacrificar nuestra democracia y a colocarse en el poder” con una campaña “obsesionada con el pasado, no con el futuro”, dijo el demócrata de 81 años a sus simpatizantes, alternando entre susurros y gritos.
Biden eligió un lugar simbólico para su discurso, cerca de Valley Forge, donde George Washington reagrupó las fuerzas estadounidenses durante la guerra de independencia hace casi 250 años. AFP