La víctima, Marcial Alvarenga Guerrero, estaba yendo a esperarle a su novia en la parada del colectivo cuando fue interceptado por los dos motociclistas y uno de ellos le clavó en el pecho. La hoja del arma blanca alcanzó a perforarle el pulmón y afectó el corazón. Fue encontrado por los vecinos y luego por su novia.
Mal herido, el joven primeramente fue llevado al Hospital de Limpio, pero por la gravedad de su herida se lo trasladó al Sanatorio Americano, donde le sometieron a una cirugía y quedó internado con pronóstico reservado.
HIPÓTESIS. Los agentes de la comisaría jurisdiccional mencionaron que, por las características del hecho, no se trató de un asalto, ya que los agresores no se llevaron nada de la víctima. La hermana, Adriana Alvarenga, manifestó, asimismo, que Marcial tuvo un problema reciente con una persona por la compra de un celular; había pagado de manera anticipada, pero no le entregaron el aparato. La víctima estuvo reclamándole a dicho sujeto, con quien aparentemente se peleó.
Adriana sospecha que este sería el trasfondo del intento de homicidio que sufrió su hermano y que lo puso entre la vida y la muerte.
En el mismo sentido, los agentes investigadores de la comisaría de Piquete Cué –quienes ya se encuentran realizando diligencias investigativas para esclarecer el caso– por sus características piensan que el hecho se pudo tratar de un ajuste de cuentas.
Los investigadores empezaron a averiguar en la víspera si en el vecindario existen viviendas que cuenten con cámaras de seguridad que puedan aportar a la investigación.
Aparentemente, el joven negoció la compra del celular con presuntos adictos a las drogas que asaltan en los alrededores para volver a vender lo robado a cualquier postor.
