MEGAESCENARIO PARA POLÍTICAS PÚBLICAS. Dentro de dichas políticas públicas, la política presupuestaria, la tributaria, la crediticia, la social, la ecológica y la de asistencia técnica múltiple, entre otras, conforman el megaescenario, dentro del cual los instrumentos de las mismas deben encontrar implementación, en coherencia con sus objetivos específicos:
• Presupuesto público: Ingresos y egresos en equilibrio.
• Política tributaria: Imposición justa para financiar el presupuesto público y las demás necesidades del desarrollo sostenible.
• Política crediticia: Volver accesibles los créditos blandos en términos de periodos de gracia, plazos de amortización y tasas de interés.
• Política social: La superación de la pobreza, con participación plena de la población en el mercado del trabajo y con protección social adecuada.
• Política ecológica: El equilibrio en el medioambiente, de forma tal que el hábitat natural se haya restaurado y fortalecido.
• Política de asistencia técnica: Brindar no solamente educación general, sino también y sobre todo capacitación técnica para todos, en forma gratuita o a costo accesible.
POLÍTICA DE ASISTENCIA TÉCNICA A PRODUCTORES. El saber hacer las cosas es la garantía del éxito personal y del bienestar social. Para lograrlo, hace falta poner todo el énfasis en más y mejor educación en todos los niveles (primario, secundario, universitario y terciario así como técnico), en todas las áreas geográficas del país y en todos los segmentos sociales. Es necesario, pero no suficiente, brindar educación general gratuita a todos. Aunque esta educación general sea buena, que en nuestro país no lo es, es igual de importante la educación técnica, en el sentido amplio del término: técnico-agropecuario, técnico-industrial, técnico-mecánico, técnico-electricista y similares así como ingeniería y especializaciones conexas al igual que capacitación sistemática en todas las disciplinas relacionadas con el desarrollo sostenible. Una gran parte de los micro y pequeños empresarios urbanos y productores rurales no tiene acceso a asistencia técnica de ninguna clase. Urge poner en marcha un plan nacional a tal efecto. Para eso se necesita presupuesto.
POLÍTICA HACIA CALIDAD COMPROBABLE. La articulación de una política hacia la calidad en la producción pecuaria es necesaria, pero no suficiente. Hay que volverla comprobable también. Eso se logra con la expedición regular de certificados de calidad. Es importante fijarse que la correlación positiva entre buena producción comprobable versus protección del medioambiente o “producción compatible con el equilibro ecológico” esté dada.
PRESUPUESTO PÚBLICO. Tener partidas presupuestarias asignadas a los ministerios y demás dependencias públicas no es igual automáticamente a su transferencia puntual. Con frecuencia, se producen moras considerables. En determinados casos, son también sumas significativas. En esas situaciones, es importante el poder de cabildeo o lobby que pueda tener o hacer dicha dependencia pública. Cuando el Ministerio de Hacienda no cuenta con ingresos suficientes, la mora se vuelve un fenómeno consuetudinario. En tales circunstancias, ni el Ministerio de Agricultura y Ganadería ni el sector pecuario podrán cumplir con la ley, que los ha creado, ni con los planes, programas y proyectos que se han propuesto.
