La uniformada trabajaba en el Departamento de Identificaciones de la Policía Nacional. Según los intervinientes, la mujer habría tratado de quitarse la vida luego de cometer el homicidio de su hija.
La víctima fue identificada como Camila Belén Villar Casco (23), quien padecía de hipoxia cerebral y se encontraba en estado vegetativo. Los familiares de Camila explicaron que debido a esto, su madre entró en depresión.
Casco habría cortado las venas de ambas muñecas de su hija con un bisturí, luego se realizó también cortes en ambas muñecas y una herida en el abdomen, por lo que se encuentra internada en el Hospital de Policía Rigoberto Caballero. El hecho sucedió en la ciudad de Fernando de la Mora.
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La víctima había desaparecido en mayo del año pasado y tras la búsqueda de sus familiares fue encontrada en unos matorrales en una compañía cercana a la ciudad de San Bernardino. La mujer estaba inconsciente, en el suelo, a metros de su automóvil. Nunca se supo qué fue lo que le ocurrió en aquella ocasión.