Médicos del Hospital del Trauma emitieron este domingo una alerta sobre riesgos de los fuegos pirotécnicos. El doctor Jesús Marín afirmó que no existe ningún artefacto pirotécnico que esté exento de producir alguna lesión, por lo que piden tomar medidas de precaución.
“Todos producen lesiones, desde esta estrellita. Le sigue el fosforito, las maripositas. Clasificamos en dos los daños causados por estos artefactos: los que producen quemaduras y los que ocasionan mutilaciones”, explicó Marín, jefe de Cirugía de Manos del Hospital del Trauma.
Aclaró que estas bombas utilizadas por niños, adolescentes y también por adultos en épocas de Navidad y Año Nuevo pueden causar quemaduras de 1, 2 y hasta 3 grados, siendo esta última la más grave.
“Estamos jugando con pólvora. Para tener una idea de la peligrosidad de estos artefactos cuento que un gramo de pólvora equivale a 35 kilos de fuerza. Es decir, una bomba 12x1, por ejemplo, tiene entre 5 a 7 gramos de pólvora, lo que equivale a que se te caigan por la mano 3 heladeras”, ejemplificó.
Causan lesiones en la piel, en los músculos, en los tendones y puede llegar a las amputaciones de algún miembro.
“‘No usen explosivos, carajo’ deberíamos de decir también. Al comprar un petardo se escoge el daño que le quiere hacer a su criatura. Lo único que buscamos es que no se toquen bombas y las familias puedan escuchar una buena música navideña al lado del pesebre”, dijo en una visita a La Lupa.
“Oídos sensibles”. Según el director del Hospital del Trauma, Aníbal Filártiga, “debería de aplicarse el ‘No uses explosivos, carajo’, ‘no chupes, carajo’, pero no se puede pues ponerle a todo”.
“Ya recibí unas cuantas puteadas de oídos sensibles (sic). Estas son expresiones que usamos todos los días: ‘acá viene ya otra vez alguien que no usó su casco, carajo’”, refirió.