Esto, a raíz de que en México se abrió una causa penal por robo de oro y los agentes policiales tienen las sospechas de que existe vinculación con el hecho registrado en Paraguay, comentó el representante del Ministerio Público.
Además, Cantero mencionó que el dueño de la empresa Cristal del Este SA, Gregorio González, se puso a disposición y presentó documentos que demuestran que los fraguaron y también que le falsificaron su sello. González responsabilizó directamente al despachante de Aduanas, Ricardo Castro Vera, quien supuestamente gestionó el envío de la carga.
El juez Humberto Otazú decretó el arresto domiciliario del empresario.
Los ciudadanos mexicanos Juan Ignacio Ontivero Muñoz, Juan Carlos Jaramillo y José Salazar Tinajero, el belga Didier Marc André, el dominicano Manuel Portes Medina y los despachantes Ricardo Castro Vera y Gustavo O’Higgins, al igual que González y Juan Carlos Mendoza Alfonso, fueron imputados por contrabando.
El Instituto Nacional de Tecnología, Normalización y Metrología (INTN) analizó 40 kilos de los lingotes, de los cuales 1,450 kg es oro.