En la madrugada de este lunes, Gustavo Jara (31) denunció por medio del sistema 911 que un desconocido ingresó a su domicilio para robar. Luego de 20 minutos, cuatro agentes policiales de la Comisaría 7.ª Metropolitana llegaron a su vivienda para “verificar” lo sucedido, a bordo de dos patrulleras.
El hombre había relatado a los agentes policiales del 911 que un desconocido ingresó a su casa alrededor de las 01.30 de este lunes con el fin de concretar un robo. Sucedió en barrio Pinozá de Asunción.
Comentó que, incluso, se enfrentó al delincuente, hasta que se acrecentó su temor cuando el ladrón lo apunto con un arma de fuego, tras lo cual huyó de su casa para llamar a la Policía.
Unos 20 minutos después, pese a vivir muy cerca de la comisaría, cuatro agentes policiales llegaron a bordo de dos patrulleras hasta la vivienda, ingresaron a la casa y notaron que el ladrón ya no estaba en el lugar.
En cierto momento el denunciante, según comentó a Radio Monumental 1080 AM, ingresó a su casa para hablar con los uniformados, cuando vio que los mismos salían de su habitación. Tras ello observó su cama, donde había dejado sus dos celulares antes de salir de la vivienda, y notó que ya no estaban ahí.
Gustavo, rápidamente, les preguntó si ellos habían tocado los celulares; momento en que los hombres negaron y uno de ellos, bajo la idea de “ir a hacer patrullaje para encontrar al ladrón, abandonó el lugar sin más explicaciones, mientras que su compañero lo acompañó y se quedaron otros dos a “investigar el hecho”.
La víctima de lo sucedido sostuvo que, con el fin de encontrar sus celulares, ingresó a una cuenta suya por medio del teléfono de su pareja para ubicarlos mediante GPS. Su sorpresa fue grande cuando verificó, estando en la comisaría para denunciar el robo domiciliario, que su teléfono estaba “circulando hacia él”, explicó.
“Abrí una aplicación en el celular de mi pareja para recibir información del GPS cuando la tecnología me muestra que el celular está viviendo hacia mí y, coincidentemente, llegó una patrullera a la comisaría. Los oficiales se escondieron de mí", comentó.
El hombre concretó ambas denuncias en la misma comisaría y luego regresó a su vivienda. Al llegar a su casa encontró sus dos celulares arrojados en el suelo, frente a su vivienda.
Los uniformados que participaron en esta intervención fueron los suboficiales segundos Diego Rivarola e Ignacio Ayala, en el móvil 070, y en el móvil 071, los suboficiales Juan Cardozo y Jorge Benítez, quienes fueron sindicados como sospechosos.
Añadió, además, que cuenta con todas las capturas de pantalla para demostrar que fueron los agentes quienes intentaron robarle sus celulares. Comentó que accionará contra los cuatro uniformados tras el irregular procedimiento y que, incluso, el caso ya está en manos de la Fiscalía.