Preocupación es el sentimiento de los pobladores de la ciudad de Alberdi, departamento de Ñeembucú, ante la incertidumbre de la crecida del río Paraguay y una posible evacuación en caso de que el muro de contención no resista el avance de las aguas.
La gente pasó Noche Buena y Navidad en inmediaciones de la barrera para asegurarse de que la misma no ceda. En la tarde de este viernes, los mismos lugareños reforzaron esa defensa encimando bolsas de arena.
A ninguno de ellos le agrada la idea de tener que abandonar sus hogares y por esa razón están haciendo todo el esfuerzo para evitar que las aguas sobrepasen el muro de contención. Los mismos también desean que las lluvias amainen en la zona.
La solidaridad es el denominador común entre los pobladores para actuar ante la crisis que les toca afrontar actualmente. Incluso denuncian la ausencia de las autoridades gubernamentales, informó el periodista de ÚH, Lorenzo Villalba.
La Municipalidad decretó emergencia distrital por la crecida del río Paraguay, que hoy 25 de diciembre alcanzó los 9,23 metros en Alberdi.
La ciudad se encuentra aislada ya que el camino que llega hasta allí desde Asunción, ingresando por el desvío que se encuentra en Villeta y que pasa por Surubi’y, Villa Oliva, Villa Franca, entre otras localidades, está cortado por el agua que sobrepasa la arteria de tierra.
Algunas de las familias afectadas por la crecida del cauce hídrico se vieron obligadas a pasar las fiestas fuera de sus casas. Un caso particular es la de una familia que festejó sobre unos botes. Sobre los mismos pudieron armar una mesa para la cena y el almuerzo de Navidad.