“Como profesor titular de Derecho hace 35 años y en mis 44 años de experiencia, considero repugnante lo que le están haciendo a esta señora. No tengo ningún interés, pero me asquea la justicia podrida y me extraña que la jueza Dina Marchuk se haya prestado a esto”, señaló a los medios.
Delmás se mostró indignado con la decisión judicial. “Me escandalicé por escuchar lo que está pasando. Hubo un acuerdo privado y una persona en rebeldía se presentó. Ya se reparó el daño y por su edad ella debería estar en libertad ambulatoria”, aseveró.
“Ella reparó el daño, se sometió al proceso. No debe estar acá, cuando menos debería tener prisión domiciliaria. Ella es una anciana como yo y no puede estar acá. No tengo ninguna relación con ella y si fuera otra persona también estaría acá. Esto se llama justicia vindicativa, esto supone una venganza. Yo me pongo a disposición de ella absolutamente gratis. Aquí hay una vendetta y una venganza. Por eso estoy escandalizado”, dijo.
El abogado Guillermo Delmás llegó hasta la penitenciaría de mujeres minutos después de que la actriz argentina Moria Casán ingresara por disposición de la jueza Dina Marchuk. El mismo se anunció y pidió conversar con la argentina.
Sobre Casán pesaba una orden de captura internacional por el escándalo de las joyas, un juego de gargantilla y aros con zafiros y brillantes valuadas en USD 80.000, que utilizó durante un espectáculo en la Conmebol en agosto de 2012, propiedad del joyero luqueño Armando Benítez, y que fueron robadas.