Rojas dijo que pocos días después de la reunión realizada el 5 de noviembre del 2014 con De Souza y los senadores Arnaldo Giuzzio y Arnoldo Wiens, extrañamente, una abogada, cuyo nombre se reservó pero consta en carpeta fiscal, se acercó a la Senad con intenciones de que el narcotraficante firmara un documento en que desestimaba lo que había mencionado en la entrevista y aclaraba que había sido obligado a dar las declaraciones en que vinculaba a autoridades con esquemas de sobornos.
Explicó que esta abogada le llevó un documento y con la promesa de que si el firmaba iba estar protegido por su enviado, que es un conocido narcotraficante que está en prisión.
Ante la primera consulta, si conocía de los hechos antes de realizarse la entrevista, el secretario de Estado respondió que ya en el 2012, cuando el narcotraficante fue detenido, había manifestado informalmente algunas situaciones.
Comentó que ese mismo año había facilitado informaciones que desencadenaron en el operativo Águila Negra II y que el fiscal Carlos Alcaraz estaba al tanto de ello. Refirió que no recuerda si en ese momento ya mencionó al viceministro de Seguridad, Javier Ibarra.
Según relató, el brasileño fue derivado a la Senad durante la gestión de Francisco de Vargas.
El año pasado, pidió hablar con el actual ministro, le comentó que tenía informaciones de que había intenciones de trasladarlo a Tacumbú, donde sería asesinado. Ante este temor, pidió hablar con medios de comunicación y con autoridades.
Allí Rojas le recomendó hablar con miembros de la Comisión de Lucha contra el Narcotráfico de la Cámara de Senadores, uno de la oposición y otro del oficialismo. El reo aceptó y fue así que llamó al senador Giuzzio primeramente.
A la pregunta acerca de las intenciones de tal encuentro, respondió que la única motivación era trasmitir seguridad al narcotraficante, de que no iba a ser trasladado a Tacumbú.
Aclaró que no comentó al presidente Horacio Cartes sobre la entrevista porque no lo consideró pertinente. Sí llamó al ministro del Interior, Francisco de Vargas, quien le manifestó que ya estuvo en comunicación con los senadores.
En otro momento, dijo que los parlamentarios deben tener presencia permanente en las instituciones del Estado. “Continúo yo, más que convencido de que la función del parlamentario no se debe limitar a la legislación solamente”, expresó.
Sobre las informaciones que brindó De Souza que facilitaron la caída de cargamentos de narcotraficantes dijo que tienen hacia el detenido una credibilidad del 70%, y sobre el cohecho un 30%. En tanto que el ministro del Interior restó credibilidad a la entrevista, según reclamó el senador Carlos Filizzola.
Resultados tras detención. Rojas dijo que tras la detención de Ezaquiel en el 2012, el mismo comenzó a brindar informaciones sobre narcotráfico y corrupción. Aseveró que gracias a estos datos, se lograron resultados “excelentes” en el combate a este flagelo. Agregó que las informaciones incluso contribuyeron a realizar intervenciones en otros países con “éxito muy importante”.
Informó que se recurrió a la comisión de lucha contra el narcotráfico debido a que De Souza dijo temer por su vida.
