PEKÍN
El dirigente norcoreano, Kim Jong Un, llegó el martes a Pekín, donde Xi Jinping y Vladimir Putin, sus principales aliados, celebraron su relación “estratégica” en vísperas de un gran desfile militar en el que China busca mostrar su poderío.
Según fuentes del Kremlin, durante el acto Kim se sentará junto a los dos mandatarios, lo que supondría una imagen de fuerte alineamiento frente a Estados Unidos y sus aliados de occidente.
Kim llegó por tren el martes por la tarde a Pekín y allí fue recibido por Cai Qi, el quinto funcionario de más alto rango en China, y por el canciller Wang Yi, según la agencia oficial norcoreana de noticias KCNA.
Kim, el presidente chino Xi Jinping y el ruso Vladimir Putin se unirán a más de veinte líderes mundiales en un desfile que conmemorará los 80 años del final de la Segunda Guerra Mundial.
China quiere mostrar su potencia militar con tropas marchando en formación, revistas aéreas y armamento de última tecnología en la Plaza de Tiananmen.
MUESTRA DE UNIDAD. El país ha promocionado su desfile como una muestra de unidad con otros países, y la asistencia del dirigente de Corea del Norte será la primera ocasión en que aparezca junto a Xi y Putin en el mismo evento.
Se trata del segundo viaje de Kim al extranjero en seis años y el norcoreano vino al parecer acompañado de su hija, Kim Ju Ae, dijo el Servicio Nacional de Inteligencia de Corea del Sur a la prensa.
Esta visita de Kim “formaliza la relación trilateral China-Rusia-Corea del Norte ante el público”, dijo Soo Kim, consultora de riesgos geopolíticos y exanalista de la CIA, a AFP.
Por su parte, Xi y Putin mostraron su entendimiento durante conversaciones mantenidas en Pekín.
“Nuestra estrecha relación refleja la naturaleza estratégica de los vínculos ruso-chinos, que actualmente se encuentran en un nivel sin precedentes”, declaró el presidente ruso a su anfitrión durante una reunión bilateral.
GAS. El gigante ruso Gazprom, que perdió a su principal cliente –Europa– con la guerra contra Ucrania, anunció el martes que había llegado a un acuerdo para la construcción de un segundo gasoducto que aumentará aún más sus suministros de gas a Pekín. En otra reunión bilateral, Putin pidió al primer ministro eslovaco, Robert Fico, cuyo país –miembro de la UE– sigue recibiendo hidrocarburos rusos al igual que Hungría, que dejara de redirigirlos a Ucrania. “Entonces los ucranianos lo entenderán”, subrayó.
En cuanto al presidente chino, este destacó en un encuentro con su homólogo iraní, Masud Pezeshkian, la oposición de Pekín al “uso de la fuerza” en la resolución de conflictos.
China, socio cercano de Irán, declaró que se oponía a una iniciativa de Francia, Reino Unido y Alemania que podría volver a imponer sanciones contra la República Islámica debido a su programa nuclear.
El desfile de hoy cerrará una semana diplomática intensa para Xi, quien el domingo y el lunes recibió en Tianjin (norte) a líderes euroasiáticos en la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái para promover una gobernanza mundial alternativa.