A través de una cámara de circuito cerrado se puede observar cuando una persona desconocida arroja una bomba de fabricación casera en el interior de la vivienda de Carlos Roa, candidato a concejal municipal por el Movimiento Somos Luque.
La vivienda de Roa, quien también es sindicalista de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), sufrió el ataque en la madrugada de este martes, en el barrio Loma Merlo de Luque.
Según los datos, el fuego alcanzó a un vehículo que estaba estacionado en el patio de su vivienda y afortunadamente ninguna persona resultó herida.
“Yo sentí una explosión bastante fuerte, ya era el faro que se estaba consumiendo, en la parte trasera de la camioneta, y se rompió en ese momento el parabrisas trasero. Bastantes asustados, tuvimos que salir a correr. Controlamos el fuego gracias a Dios”, expresó al sitio digital Luque Noticias.
Mencionó que el autor del hecho “es un novato y un aprendiz” y quienes le contrataron se equivocaron, porque a él se le cayó el material inflamable que tenía hacia el lado afuera del portón y agarró muy poco.
“Tuvimos la suerte que esto no pasó a mayores, o si no, iba ser imposible abrir el portón y se iba consumir todo. No iba estar acá contando la historia”, agregó.
El político descarta que el atentado haya sido por una cuestión externa que tenga en su vida personal, particular y mucho menos en su carácter de funcionario público como sindicalista de la Dinac.
El político se sumó hace 15 días al equipo de Hugo Farías, precandidato a la intendencia de la ciudad de Luque.
Sostuvo que coincidentemente ocurrió el hecho dos semanas después de que se lanzó la arena política y definieron a nivel familiar y de equipo ir por un movimiento político interno de la ciudad.
“Es muy llamativo, es mucha casualidad. Esto es fuera de contexto por cualquier otro motivo que se pueda querer buscar, esto es netamente político. No sé por qué ni para qué, soy uno más de los que entran en competencia (electoral), tengo el acompañamiento familiar y de algunos amigos”, mencionó.
Por último, manifestó que al que mandó hacer esto, si le molesta alguna cuestión personal suya, que le diga a él y que no le amedrente a su familia, mucho menos a su hijo de 6 años.