Con la frase Patri-archy is our judge (el patriarcado es nuestro juez), las participantes en la protesta, que desafiaron las bajas temperaturas y el granizo, comenzaron a entonar Un violador en tu camino, que cantaron parte en inglés y parte en español, lideradas por el colectivo chileno “Las Tesis”, artífices de este himno.
La chilenas también guiaron al resto a la hora de ejecutar la coreografía que acompaña esta canción, que antes, para que todo saliera bien, habían ensayado en el punto de partida de la marcha, la Freedom Plaza (Plaza de la Libertad).
Fiesta y reivindicación frente a los antiabortos
En su IV edición, la Marcha de Mujeres tuvo una participación ligeramente más baja en la capital, donde, a diferencia de otros años, rodeó la Casa Blanca, que Donald Trump abandonó ayer junto a la primera dama, Melania Trump, para pasar el fin de semana en su club de golf de Mar-a-Lago, en Florida.
La protesta transcurrió en un tono festivo, a la vez que reivindicativo, pese a los esfuerzos de un pequeño grupo de manifestantes antiaborto que trataron de manera infructuosa de reventarla.
Para Theresa, de 66 años, era la segunda vez que acudía a la manifestación feminista: "¡Este año hace más frío que el año pasado!”, bromeó en declaraciones a Efe.
Esta jubilada, de Carolina de Sur, acudió a la protesta acompañada de su amiga Claudia, de 74 años.
Republicana, feminista y no votó a Trump
Ambas recordaron que ya protestaban en los años 60 por los derechos de las mujeres, pero Theresa indicó que la Presidencia de Donald Trump supuso un punto de inflexión.
“Yo voto por los republicanos, pero no voté por Donald Trump (en 2016). Es lo peor que le pasó a EEUU en mi vida”, afirmó esta mujer, que auguró que si es reelegido “seguro” que habrá más manifestaciones de este tipo.
La primera Marcha de Mujeres se celebró un día después de que el 20 de enero de 2017 Trump fuera investido presidente y surgió por el impulso de un grupo de jóvenes que no podía creer que un candidato acusado de abuso sexual por varias mujeres ganase las elecciones.
Elegir una presidenta: ¿Utopía o realidad?
Siendo 2020 un año electoral, en la manifestación de este año había numerosos carteles exigiendo que una mujer sea elegida como presidenta, pero los pósteres que apoyaban a un candidato masculino en concreto, como los demócratas Bernie Sanders, Andrew Yang o Pete Buttigieg, eran más numerosos que los que respaldaban específicamente a aspirantes mujeres, como la también progresista Elizabeth Warren.
Pese a que los comicios de este año y el juicio político al presidente, que está previsto que comience el martes, marcaron la manifestación, las pancartas contenían mensajes de lo más variado.
“Las feministas demandan justicia para los inmigrantes”, “resistan”, “revisa tus privilegios: hombre, blanco, heterosexual, cristiano...”, “ya es hora de que protejan la tierra”, “no más menores en jaula” o “Trump/Pence: fuera ya” fueron algunas de las consignas, en ocasiones en español, que llevaron en sus carteles las participantes en la protesta.
Más allá del feminismo
Cerca de la cabecera de la marcha avanzaba Tayna, una estudiante de 17 años, que no dudó en trasladarse a Washington, junto a sus amigas, desde Richmond (Virginia).
“Queremos mostrar nuestro apoyo a los derechos de las mujeres, porque abarcan varios asuntos no solo de mujeres, sino también de hombres”, dijo a Efe Tayna, de origen puertorriqueño y que portaba una pancarta en español que decía “Respeten a las mujeres”, aunque confesó que dominaba poco esta lengua.
Pese a respaldar los objetivos generales de esta protesta, Tayna subrayó que también decidió asistir por su origen puertorriqueño: “La manera en que Trump maneja los asuntos en Puerto Rico es terrible, y creo que el Gobierno tiene que trabajar mejor a la hora de responder a desastres naturales”.
La adolescente se refería a la polémica reacción de Washington tras el paso del huracán María en 2017 por la isla, que dejó una gran devastación y un gran número de víctimas.
Mientras Tayna hablaba, el resto de manifestantes en el inicio de la marcha proseguían sus cánticos, todos ellos opuestos a Trump. “Enciérrenlo”, comenzaron a corear, hasta que los gritos se desvanecieron, para ser sustituidos por un “hehe, hoho, (soy) un escéptico de Donald Trump”.
Los gorros rosas de las manifestantes en la Marcha de Mujeres también inundaron hoy otras partes de EEUU, como Nueva York o Los Ángeles.