A menos de tres semanas de un esperado debate entre la vicepresidenta demócrata y el ex presidente republicano –y a solo un mes de que comience la votación anticipada–, los sondeos muestran que la batalla por la Casa Blanca está reñida.
Harris sale de la Convención Nacional Demócrata celebrada esta semana en Chicago con el viento a favor.
Ha superado a Trump en las encuestas, borrando la ventaja que mostraba el republicano antes de que ella sustituyera hace un mes al presidente Joe Biden como candidata demócrata.
Sin embargo, no se durmió en los laureles. “Esto estuvo bien, pero ahora tenemos que seguir adelante”, declaró a NBC News..
Dan Kanninen, uno de los encargados de la campaña de Harris, advirtió que la carrera “no ha cambiado en lo fundamental” y sigue “muy, muy ajustada”.
APOYO DE KENNEDY AL REPUBLICANO. Un giro en una contienda ya muy agitada se dio este viernes con el anuncio del candidato de un tercer partido, Robert F. Kennedy Jr, de que respaldará a Trump.
Kennedy, un teórico de la conspiración que ha sido rechazado por gran parte de su famosa familia, tiene escaso apoyo propio.
El hijo de Robert F. Kennedy y sobrino del ex presidente John F. Kennedy, tiene según las encuestas menos de un 5 % del simpatizantes, pero aun así podría incidir en favor del republicano en una elección que seguramente se decidirá por márgenes minúsculos.
Harris aceptó la nominación presidencial de su partido en Chicago, arropada por una constelación de estrellas y celebridades.
En apenas un mes, la primera mujer negra con posibilidades de llegar a la Casa Blanca logró revitalizar a su partido y captar donaciones récord para su campaña de 500 millones de dólares y está viviendo una luna de miel.
Su campaña recibió otro impulso potencial cuando el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo que “ha llegado el momento” de un recorte de las tasas de interés, algo que reducirá los costos hipotecarios y otras presiones inflacionarias para los votantes.
Los obstáculos para Harris provienen de tensiones internas en el partido sobre la política estadounidense en relación a la Franja de Gaza y el retiro de Kennedy de la contienda.
La compañera de fórmula de Kennedy, Nicole Shanahan, afirmó en X que los demócratas la estaban “inundando” con “llamadas, mensajes de texto y correos electrónicos frenéticos”. Están “aterrorizados ante la idea de que nuestro movimiento una fuerzas con Donald Trump”, dijo poco antes de conocerse el apoyo al candidato republicano.
Pesos pesados demócratas, como Michelle Obama y Bill Clinton o el compañero de fórmula de Harris, Tim Walz, han advertido que el partido podría perder frente a los republicanos de Trump si cae en triunfalismos.