Incluso, antes de su cuarta inculpación en Georgia, el precandidato presidencial republicano para 2024 envió un correo electrónico a sus simpatizantes, invitándoles a rebelarse haciendo un donativo. “El Departamento de Justicia de Biden está tratando de ENCARCELARME DE POR VIDA”, dijo, antes de pedir a los “patriotas” que desembolsaran entre 24 a 1.000 dólares para su candidatura electoral.
“Nuestra República pende de un hilo y Estados Unidos os necesita ahora mismo”, afirmó. Desde su primera inculpación en Nueva York hace unos meses, Trump, de 77 años, ha inundado a sus partidarios con mensajes de texto y correos electrónicos de este tipo, salpicados de un léxico incendiario. Para él, los cuatro casos por los que ha sido inculpado constituyen una “caza de brujas” y el presidente demócrata Joe Biden es un líder “corrupto” a la cabeza de una “dictadura de pacotilla” que intenta “eliminar a su principal opositor”.
El resultado está a la vista: El equipo de campaña del republicano anunció haber recaudado más de 4 millones de dólares en las 24 horas siguientes a su primera inculpación. Y se jactó de haber recaudado casi USD 7 millones justo después de la segunda, por presunta negligencia en el manejo de secretos de Estado. AFP