A dos de ellos, Salah Gourmat y Sammy Djedou, se les relaciona con los atentados terroristas del 13 de noviembre de 2015 en París, mientras que el tercero, Walid Hamman, fue condenado en ausencia en Bélgica por una trama terrorista desmantelada ese mismo año.
Los tres formaban parte de la red liderada por Boubaker Al-Hakim, que murió en otro ataque de la coalición el 26 de noviembre.