“Después de una recesión muy aguda”, el Gobierno está tomando varias medidas, como un severo ajuste fiscal, para “crear un ambiente muy favorable a los negocios”, afirmó el mandatario en la apertura del congreso Rio Oil & Gas 2016 ante un auditorio con empresarios del sector.
Como ejemplo del nuevo talante de su gabinete –que gobierna de forma interina desde mayo y oficialmente desde agosto en sustitución de la destituida Dilma Rousseff (izquierda)– Temer quiso enfatizar las mejoras en la petrolera estatal Petrobras.
“Petrobras era el símbolo de algo que estaba completamente desajustado y hoy es una de las empresas más ajustadas del país”, subrayó el mandatario asegurando que la firma se revalorizó en los últimos meses 137% en el mercado. Pero Temer advirtió que el nuevo rumbo liberal y abierto al mercado que impulsa su gobierno debe hacerse con el apoyo del Congreso y “en conjunto con la iniciativa privada”. Por eso, ante los inversores petroleros, destacó el proyecto que abre las puertas a la iniciativa privada para explotar los yacimientos petrolíferos en aguas profundas (presal) y ratificó la seguridad jurídica que tienen las empresas en el país, con nuevas leyes como las que prevén autonomía para las agencias reguladoras. “Este es el nuevo Brasil que estamos construyendo: más moderno, más estable y más próspero”, enfatizó. Aunque el presidente es visto con buenos ojos por el mercado, su popularidad es baja y algunos de sus colaboradores son investigados.