Por Elías Cabral
CANINDEYÚ
Los ocupantes del asentamiento 1º de Marzo, ubicado dentro de la estancia Pindó, Canindeyú, volvieron a conectar la energía eléctrica, cortada el miércoles 25 de mayo pasado por una comitiva encabezada por funcionarios de la ANDE, Ministerio Público, con acompañamiento policial.
La información fue confirmada por el jefe de la ANDE oficina Curuguaty, Víctor Insaurralde, el mismo que encabezó el procedimiento donde se desconectó el servicio que se utilizaba en forma clandestina por los labriegos.
Insaurralde informó que el viernes pasado a tan solo dos días del corte, los sintierras reconectaron el servicio en el mismo lugar, a la línea de alta tensión que parte desde la comunidad indígena Yukyry distrito de Itakyry, Alto Paraná, a través de una línea sujetada por columnas de madera que llega hasta el mencionado asentamiento.
Por su parte, el fiscal Lorenzo Lezcano, quien encaminó la intervención, no quiso adelantar las acciones que tomará el Ministerio Público al respecto, pero dio a entender que se realizarán nuevas intervenciones en los próximos días.
ENFRENTAMIENTO. El miércoles 25, un grupo de aproximadamente 30 policías en compañía de funcionarios de la ANDE debían proceder a cortar la energía eléctrica de la colonia Pindó en el asentamiento 1º de Marzo, ocupado actualmente por un grupo de sintierras.
No obstante, unos 2.000 metros antes, en el límite entre Canindeyú y Alto Paraná, la comitiva recibió disparos de parte de los ocupantes. El corte debía hacerse ese mismo día, porque los labriegos están usufructuando la energía de forma ilegal.