A puertas del inicio de la prueba que definirá si Paraguay retorna o no a la lista gris de países con riesgo de lavado de dinero y financiamiento del terrorismo, la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad) atravesó por el cambio de su autoridad máxima, María Epifanía González, como consecuencia de la convulsión generada por el acuerdo secreto de Itaipú.
Aún en medio de la crisis, el actual ministro de la Seprelad, Carlos Arregui, anunció que seguirán trabajando en los 12 proyectos de leyes anti lavado que siguen en estudio en el Congreso Nacional y mencionó al examen del Grupo de Acción Financiera de Latinoamérica (Gafilat) como la prioridad de su administración, para luego enfocarse en otros objetivos. Consideró que se ha trabajado eficientemente en las capacitaciones para prevenir estos delitos en el país.
“Es un trabajo muy importante el que se vino haciendo, hay que continuar porque es una situación muy especial la que se vive ante la proximidad de la evaluación del Gafilat. (El resultado) no dependerá solamente de la Seprelad, sino de un conjunto de entidades del Estado, donde cada uno está poniendo de su parte para que podamos lograr el cumplimiento de pasar la evaluación y crecer en cuanto al concepto que se tiene de nuestro país”, expresó.
“Somos conscientes de que los plazos son bastante exiguos en este momento, esta semana seguramente vamos a reunirnos con algunos de los referentes en relación a los proyectos de leyes que son más relevantes y que la evaluación va a hacer hincapié en su implementación”, agregó.
Se espera que el examen de Gafilat arranque en setiembre próximo y que sus resultados se den a conocer en diciembre de 2020. Por otro lado, Arregui reconoció que los cambios políticos que puedan darse en Argentina probablemente atraerán inversiones hacia Paraguay, situación que si bien es positiva para el crecimiento económico, requerirá de una mayor vigilancia de los flujos de capitales.