25 abr. 2024

“Se tiene que ver con la Fiscalía qué pasó con la denuncia de narcopolítica”

El ministro de la Senad señala que es un desafío probar los vínculos del narcotráfico con la política, pero reitera que es un enlace que no se puede negar. Espera más condenas antes que el país sea sancionado.

Arnaldo Giuzzio

Incisivo. Arnaldo Giuzzio sigue de cerca los casos que vinculan a políticos con dinero sucio.

Foto: Archivo ÚH.

adrian-caceres@uhora.com.py

Un puñado de dirigentes políticos, varios de ellos legisladores, figuraban en la denuncia presentada el 24 de noviembre de 2014 por la Cámara Alta al Ministerio Público, a partir de un informe de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) sobre políticos supuestamente vinculados a narcotraficantes. A casi seis años de dicha denuncia, no hubo avances en la Fiscalía. La acusación había sido presentada entonces por un senador, Arnaldo Giuzzio, hoy titular de la Senad, quien ratifica la denuncia y señala que el endeble sistema continúa permitiendo la incursión del dinero sucio en la política, una afirmación que le valió una sanción por 60 días a la diputada liberal Celeste Amarilla.

–¿Qué ocurrió con la denuncia que hizo en 2014?

–Es una denuncia que habíamos presentado como Comisión (de Prevención, Lucha contra el Narcotráfico y Delitos Conexos) al Ministerio Público. Fue una denuncia formal, pero después nunca más recibimos información respecto al resultado, lo que no significa que no se haya tomado algún tipo de decisión. Se presentó la denuncia con toda la información.

–¿Por qué cree que no se avanza en la investigación, porque se sabría de ello?

–Yo creo que sí (si prosperaba la investigación se iba a dar publicidad). Pero no tenemos reportes del resultado. Creo que se tiene que ver con el Ministerio Público qué ocurrió con esa denuncia.

–La Fiscalía es muy cuestionada por diversos sectores, ¿qué opina sobre estos cuestionamientos?

–Como Senad no tenemos ningún cuestionamiento al Ministerio Público. Todas las investigaciones que llevamos a cabo, compartimos esa información con la Fiscalía. Hasta donde sabemos están siendo llevadas adelante por las unidades antidrogas. Las otras unidades desconozco cómo estarán, porque estamos muy enfocados en drogas, crimen organizado y lavado de dinero. En este ámbito tenemos el apoyo, la colaboración. Sí es cierto, en muchas otras (situaciones) hay informaciones que revelan ciertos cuestionamientos. Pero por lo menos lo que nosotros tenemos, casos que involucran a políticos como por ejemplo Ulises (Quintana) y otros, la Fiscalía se maneja muy firmemente. De la lista que se presentó en 2014 es de la que no se sabe nada.

–¿Qué piensa del financiamiento espurio en las campañas políticas?

–Al tener una norma poco clara, que no permite un verdadero control del financiamiento político, entonces es muy vulnerable para que no solamente el narcotráfico financie campañas políticas, sino la corrupción también financia, el lavado de dinero financia campañas políticas, el contrabando hace lo propio. O sea, en realidad, al no estar contemplado un eficiente mecanismo de control, es muy difícil determinar cualquier tipo de origen ilícito que puede financiar una campaña. Más aún cuando en este caso vamos a tener probablemente el desbloqueo de listas; es decir, cada candidato va a estar pugnando por estar en una lista y por una candidatura. Cada candidato va a tener que financiar su campaña, ya no es el partido y el movimiento en general, y eso va a generar un mayor esfuerzo de las autoridades de control para determinar de dónde obtienen su fuente de financiamiento.

–¿La legislación paraguaya hoy está acorde para combatir este flagelo?

–En el tiempo que estábamos (en el Congreso) procuramos que se controle también el financiamiento de campañas en las internas, que es donde verdaderamente los partidos políticos, principalmente los tradicionales, apuntan gran parte de su artillería económica. Porque una vez que estás en la lista, casi asegurás determinados espacios. Eso hoy se complejiza un poco más porque cada uno va a tener que armar su propia estrategia, establecer su mecanismo de financiamiento, y también cada uno debe declarar sus cuentas. Va a ser mucho más complejo el control de la campaña.

–¿Cómo se erradica el dinero sucio de las campañas políticas?

–Por un lado, tenés normas que te pueden permitir mejorar el control de ese financiamiento privado, porque también puede darse un financiamiento natural en una campaña preliminar. En la medida que ciertos candidatos se vayan perfilando como potenciales, es natural que el financiamiento aparezca de todos los sectores. Por decirte: un sector honesto, de los buenos, va a querer aportar en una campaña, pero eso también tiene que ser controlado, porque es muy fácil para el que tiene recursos apostar a candidatos de diferentes partidos, con eso lo que va a hacer es que siempre algunos por los que apuesta van a llegar a esos determinados cargos, y eso tampoco puede permitirse. Tiene que haber también control del financiamiento privado honesto. Por otro lado, está el financiamiento público, que cada vez más se plantea restringir, y eso sí podría acrecentar aún más la necesidad de contar con financiamiento privado. Podría ser contraproducente. En la medida que uno priva de ese financiamiento público, que es más fácil de controlar, porque yo sé exactamente cuánto dinero le entrego a un partido. Por ejemplo, como Contraloría General de la República puedo intervenir y establecer con precisión, así como se audita cualquier institución pública, puedo auditar el dinero público entregado a un partido político. El tercer punto es disciplina, porque es muy difícil con el sistema de cultura que tenemos obtener documentos cuando uno le entrega dinero al puntero, al que va a obtener firmas para un movimiento, para la creación de un movimiento, es muy compleja la comprobación de esa distribución de dinero.

–¿Qué poder (Ejecutivo, Legislativo o Judicial) es más responsable de la impunidad, impunidad que favorece el ingreso de dinero sucio en la política?

–Es muy difícil, pero no imposible, probar que el dinero de tu campaña proviene de una fuente ilícita. El que está lavando dinero, del contrabando, de la corrupción, del narcotráfico, es dinero que tiene ocioso, dinero que tiene que invertir. Por eso compran hoteles, moteles, establecimientos ganaderos, incluso centros educativos, universidades, y también dejan un resto para financiar campañas políticas, porque ese dinero no está declarado, es muy difícil seguir. Un reto muy importante van a ser estas primeras elecciones con listas desbloqueadas. Ahora, en cuanto a la impunidad, una vez que se determinen los casos de financiamiento del narcotráfico en la política tienen que ser castigados, porque ese es un gran cuestionamiento a todo el sistema. El sistema de justicia lamentablemente es el que hoy sigue teniendo deudas que son reclamadas por organismos internacionales. Gafilat, por ejemplo, plantea no solamente acciones. En el caso nuestro, tanto Senad como la Fiscalía han promovido investigaciones y acusados, en muchos casos a narcotraficantes, investigaciones por lavado, pero las condenas no se compadecen con la cantidad de investigaciones, y ahí es donde se genera la gran deuda, que es lo que finalmente nos podría llevar a un tipo de sanción a nivel internacional.

Al tener una norma poco clara, que no permite un verdadero control del financiamiento político, entonces, es muy vulnerable para (recursos sucios).

Es una denuncia (de supuestos vínculos entre políticos y narcos) que habíamos presentado (...) al Ministerio Público (...). Nunca más recibimos información del resultado.

El que está lavando dinero, del contrabando, de la corrupción, del narcotráfico (...), deja un resto para financiar campañas políticas.