Este equipo está conformado por cuatro mujeres, quienes desde hace años se dedican al cuidado de los bienes culturales del país. Ellas son María Recalde, Cristina Cabaña, Carolina Garcete y Antonia Cuevas.
“La restauración consiste en devolver a un bien cultural su estado original buscando la manera apropiada de que la obra vuelva a recuperar su historia y que pueda transmitirse de generación en generación. Toda esta intervención se realiza de acuerdo con la necesidad de cada obra”, explica María Recalde, jefa de restauración de la SNC.
Para ser restaurador se estudia en el exterior y en el Instituto Superior de Bellas Artes. Hay materias donde restauradoras con mucha experiencia –como lo son Petrona Villagra y Verónica Verón– imparten cursos dentro de la malla curricular de la Licenciatura Superior de Bellas Artes.
En Paraguay, la restauración vino de la mano de Estela Rodríguez Cubero, quien falleció en julio de este 2022, a los 92 años. Se formó en Brasil en la década de 1960. El Palacio de López, las iglesias de Trinidad, Yaguarón y Altos, así como los oratorios de San Roque de Caazapá, Yuty, entre otros, estuvieron a su cargo para la restauración.
En la SNC, las restauradoras son todas mujeres, pero también hay hombres restauradores. En Paraguay existen dos tallistas indígenas que se capacitaron con expertos italianos. Quedaron sus discípulos, ya que solo hay cursos de restauración, pero no una sede educativa exclusiva.
“La restauración puede ser considerada como una labor científica que trabaja de manera específica sobre cada obra, que es producto de un momento artístico del hacer del hombre en un determinado tiempo. Se manejan diferentes procedimientos, solventes, químicos y materiales específicos, pero lo más importante es el conocimiento previo de la obra a profundidad para definir las modalidades de intervención”, comenta Clarisse Insfrán Echauri, directora de Registro de Patrimonio.
Cuatro expertas de la SNC son las encargadas de intervenir museos, templos y valiosas obras históricas.
A saber
Algunos de los trabajos que realizaron fueron en el Cabildo de Pilar, en el Museo Oratorio Cabaña de la ciudad de Caapucú, en la iglesia de Yaguarón, en la Plaza Constitución, así como en el Palacio de Gobierno. Actualmente, desde hace una semana para ser precisos, están trabajando en la Plaza de Constitución, restaurando las esculturas de metal, tras el desalojo y despeje del espacio público.