Para el técnico Emilio Rodríguez es crucial prever una reserva de forraje para el invierno, teniendo en cuenta que la pastura va disminuyendo su calidad. A su vez los granos aportan un balance entre fibra, energía y proteína.
La charla se realizó en el marco del Primer Congreso Internacional de Nutrición Bovina, donde Adolfo Pereira, director de Gestión Ganadera, destacó la integración de la agricultura a la actividad pecuaria, sobre todo por el potencial que ofrece el Chaco, donde ya se cultiva maíz, soja, algodón, chía, sésamo, una mezcla que se aprovecha en la suplementación de los bovinos. De esta manera, se puede intensificar la producción y acortar periodos de invernada de 28 a 14 meses cuando los animales pueden llegar a término de forma más acelerada.
Pereira advirtió que la nutrición es importante en todas las etapas del proceso productivo.