El proyecto de ley que crea el Sistema Nacional Catastro Registral (Sinacare) y la Dirección Nacional de Catastro y Registros Públicos (Dinacare) se trató ayer en el marco de una audiencia pública de la Comisión de Reforma Agraria y Bienestar Rural de la Cámara de Senadores, donde se escucharon más voces en contra que a favor de la iniciativa que busca unir al Servicio Nacional de Catastro (que forma parte del Poder Ejecutivo) con la Dirección de Registros Públicos (Poder Judicial).
Durante el encuentro, diferentes representantes del Colegio de Escribanos del Paraguay ratificaron su postura de rechazo hacia la iniciativa, a la que se sumaron exponentes de otros gremios y sectores, incluidos geógrafos, profesionales independientes, campesinos y otros. Dentro del bloque de oradores que se manifestó en contra del proyecto, la mayoría consideró que la Dinacare puede representar una peligrosa concentración de poderes y que el contexto de la pandemia no es el ideal para impulsar la creación de esta nueva institución.
OTRAS VOCES. Por otra parte, Manuel Riera, en representación de la Asociación Rural del Paraguay (ARP) y la Federación de la Producción, la Industria y el Comercio (Feprinco), expresó su postura a favor de la iniciativa, asegurando que por medio de la misma se podrían resolver los problemas existentes en la agilidad de los procesos que actualmente llevan a cabo Catastro y Registros Públicos, entre otros aspectos positivos.
Por su parte, Lourdes González, directora de Registros Públicos, solicitó que el tema vuelva a ser analizado en instancia de una mesa multisectorial y expresó que se plantea la duda de a qué poder del Estado responderá la Dinacare, entre otras cuestiones. Desde la Unión Industrial Paraguaya (UIP) abogaron por una mayor eficiencia en los procesos registrales, ya que los retrasos actuales afectan negativamente a la economía.
Proyectistas salieron en defensa
Durante la audiencia pública de la jornada de ayer, los senadores Enrique Riera y Fidel Zavala –quienes impulsan la iniciativa en cuestión junto a Óscar Salomón, Arnaldo Franco, Abel González y Hermelinda Alvarenga de Ortega– salieron al paso de los diferentes cuestionamientos que existen particularmente con la creación de la Dirección Nacional de Catastro y Registros Públicos (Dinacare).
Entre otras afirmaciones, Zavala dijo que el objetivo central del proyecto es obtener un ordenamiento catastro registral a nivel país y lograr mayor fluidez de negocios, ya que en la actualidad Catastro y Registros Públicos no permiten que las transacciones de propiedades fluyan, además de traer seguridad jurídica y extender la paz social con el ordenamiento territorial. Por su parte, Riera negó que con la propuesta se busque crear un “superente” con “jugosos cargos” a utilizarse para fines políticos y aseveró que, según sus consideraciones, se logrará optimizar los recursos de las entidades estatales.